Israel advirtió el domingo que dará “golpes sumamente severos” contra Hamas si no deja de organizar las protestas que han degenerado en violencia en la cerca que separa a Israel de la Franja de Gaza.
"Si tiene algo de cordura, Hamas cesará el fuego y sus estallidos violentos ahora mismo”, declaró el primer ministro Benjamin Netanyahu.
Añadió que Israel tiene preparada “una actividad muy distinta” contra ese grupo islamista si no deja la violencia.
Hamas ha estado orquestando protestas semanales en la cerca entre Israel y la Franja de Gaza desde marzo, a fin de lograr el levantamiento del bloqueo que Israel y Egipto le han impuesto al territorio desde que el grupo extremista tomó el poder allí.
Las protestas se han intensificado en semanas recientes a medida que han fracasado las gestiones para una tregua.
Las Fuerzas de Defensa de Israel dijeron que 14,000 palestinos se concentraron en la cerca fronteriza el viernes, quemando neumáticos y tirando piedras, bombas incendiarias y granadas contra los soldados.
Una veintena de palestinos se infiltraron al otro lado de la cerca. Siete de ellos fueron abatidos, entre ellos cuatro que según el ejército estaban acechando a un puesto militar del lado israelí.
El ministro de Defensa israelí Avigdor Lieberman anunció que debido a los sucesos del viernes, Israel suspenderá el envío de combustible a Gaza hasta nuevo aviso.
Gaza, ya agobiada por crónicos apagones, depende de los envíos de combustible desde Israel para alimentar a su planta generadora de electricidad. La semana pasada Israel llegó a un acuerdo para suministrarle a Gaza combustible proveniente de Catar.
“El Estado de Israel estaba dispuesto a mejorar la calidad de vida en la Franja de Gaza, pero la decisión del liderazgo de Hamas de provocar graves hechos de violencia -particularmente el mismo día en que camiones de combustible estaban yendo a la Franja de Gaza- es lo que llevó a esta decisión de suspender el envío de combustible, dijo Lieberman en un comunicado.
Israel el viernes facilitó la entrada a la Franja de Gaza de cuatro camiones llenos de combustible donado por Catar.
