Israel no permitirá que el fugitivo expresidente peruano Alejandro Toledo ingrese al país, después de informes de que había abordado un vuelo desde Estados Unidos.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel dijo que Toledo, vinculado a un escándalo de corrupción, solo sería admitido en Israel "una vez que sus asuntos en el Perú sean resueltos".
Toledo, cuya esposa Eliane Karp tiene doble ciudadanía belga-israelí, podría buscar refugio en Israel, que no tiene un tratado de extradición con la nación sudamericana.
Se cree que Toledo, que gobernó Perú entre 2001-2006, estaba en San Francisco, Estados Unidos, durante el fin de semana y posiblemente en un vuelo que aterrizará en Israel el domingo. Funcionarios israelíes dijeron que no sabían si estaba en el avión.
Una cacería internacional está en marcha después de que un juez peruano emitió una orden de arresto contra Toledo, encontrando que la evidencia presentada por los fiscales sugería una alta probabilidad de que el exmandatario habría recibido sobornos de la constructora brasileña Odebrecht, que ha admitido haber pagado a funcionarios en una decena de países de América Latina y dos de África.
Toledo es acusado de recibir sobornos por 20 millones de dólares para ayudar a Odebrecht a ganar una licitación para construir una carretera que une Brasil y Perú.
El expresidente negó las acusaciones a una televisora peruana la última semana desde París.
En 2016, Odebrecht admitió en un acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos que pagó unos 800 millones de dólares en sobornos a políticos de toda Latinoamérica, incluyendo 29 millones durante los gobiernos de Toledo y sus dos sucesores peruanos: Alan García (2006-2011) y Ollanta Humala (2011-2016).
Toledo, de 70 años, llegó a la presidencia tras luchar contra el gobierno de Alberto Fujimori, quien en 2000 huyó a Japón, desde donde renunció al puesto, agobiado por los escándalos de corrupción. Ahora Fujimori, de 78 años, está preso en Lima y cumple una condena de 25 años por asesinato y corrupción.