El secretario general de la OEA, Luis Almagro dijo el miércoles que respalda la aplicación de sanciones específicas contra funcionarios venezolanos responsables de la agitación política y económica que sacude al país sudamericano.
Pero le advirtió a un panel del Congreso que no deben imponerse penalizaciones económicas de amplio alcance que pudieran agravar el sufrimiento de los ciudadanos venezolanos. Describió a Venezuela como el país más corrupto del continente.
"La única acción del gobierno que vemos en estos días es la represión", declaró Almagro ante la subcomisión de Relaciones Exteriores del Senado para el Hemisferio Occidental y la delincuencia transnacional. "Los escenarios que observamos son bastante feos para Venezuela".
Almagro también cuestionó si las sanciones tendrían el efecto deseado, que es obligar al presidente Nicolás Maduro y a sus partidarios a efectuar cambios drásticos.
Las sanciones ayudaron a obligar a Sudáfrica a abolir el apartheid a principios de la década de 1990, señaló, pero la nación estaba comprometida a poner fin a la segregación racial. Mencionó a Cuba como un ejemplo de un país que ha resistido la presión externa para adoptar la democracia.
"No hay forma de hacer caer una dictadura desde el extranjero", señaló. "Así, las sanciones podrían funcionar o podrían no funcionar. Todo depende de la presión interna que haya en el país".
El presidente Donald Trump amenazó hace unos días con aplicar "acciones económicas" no especificadas si Maduro sigue adelante con una votación el 30 de julio sobre una asamblea constituyente.
Los partidarios del gobierno socialista de Maduro desean que la asamblea le conceda más poder sobre las pocas instituciones que aún están fuera del control de su partido gobernante. Funcionarios del gobierno de Trump les dijeron a los reporteros esta semana que sopesan una amplia gama de sanciones contra Venezuela, incluidos recortes al petróleo que Estados Unidos le compra.
Venezuela fue alguna vez uno de los más prósperos de América Latina, pero se ha sumido en un caos luego de que los precios del petróleo se desplomaron, y las granjas y fábricas nacionalizadas han suspendido su producción.
La oposición de Venezuela indicó que más de 7.5 millones de personas votaron el domingo en contra de la asamblea constituyente en un referéndum no oficial efectuado en todo el país y en comunidades de expatriados.
Almagro dijo que más de 100 personas han perdido la vida y miles más han sufrido lesiones en Venezuela desde que una ola de protestas comenzó en abril. De los muertos, más de 30 tenían menos de 21 años, indicó. Se han abierto más de 450 investigaciones sobre violaciones a los derechos humanos, señaló Almagro, y hay 444 presos políticos en el país.