La Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) seleccionó ayer al presidente de la Corte Constitucional de Ecuador, Patricio Pazmiño, como uno de los cuatro nuevos miembros de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH).
De los 23 Estados miembros de la OEA que reconocen la autoridad de la Corte IDH, 22 dieron el voto a Pazmiño pese a las advertencias de voceros de la sociedad civil sobre un supuesto conflicto de interés.
Lo anterior quedó plasmado en un informe presentado por un panel de cinco expertos convocados por la oenegé Open Society Foundation, que es avalado por al menos 60 organizaciones de la región. En ese documento, el grupo advirtió que no pudo hallar precedente de que un miembro actual del máximo tribunal de un Estado ejerza a la vez como juez de la Corte IDH.
“Crea preocupaciones por una carga de trabajo que podría impedirle ejercer sus funciones, y un conflicto de interés potencial”, dijeron.
La idoneidad de Pazmiño para el cargo también fue puesta en duda por 21 líderes de organizaciones de derechos humanos de Ecuador, que pidieron en un manifiesto antes de la votación que los países miembros impidieran su entrada en la Corte IDH, al considerar que carece de independencia por su proximidad al presidente ecuatoriano, Rafael Correa, muy crítico del Sistema Interamericano de Derechos Humanos.
“La reciente trayectoria del Dr. Pazmiño al frente de la Corte Constitucional se ha caracterizado por una serie de sentencias que violan flagrantemente la Convención Americana de Derechos Humanos”, sostienen en su misiva. Y agregan: “Por ejemplo, al avalar una Ley de Comunicación que unánimemente ha sido señalada como violatoria de los principales instrumentos de protección de la libertad de prensa o para convertir al Estado en titular de derechos humanos en procesos que invierten la doctrina y convierten a los ciudadanos en agresores y al Gobierno en víctima”.
En opinión de analistas, Pazmiño está en la Corte Constitucional de su país gracias a Correa y nunca en toda su historia como juez ha tomado una decisión que se aparte de los designios del presidente. Además, ha integrado la delegación de su Gobierno para defender a Ecuador en foros internacionales por acusaciones de violación de derechos humanos.
PATRICIO PAZMIÑO RESPONDE
En declaraciones a NTN24, tras su elección, Pazmiño restó importancia a los señalamientos que se le hacen.
Indicó que habiendo emitido al menos 3 mil sentencias es evidente que en algunas habrá quienes estén a favor y otros que las rechazan, y que él está acostumbrado a recibir las objeciones.
“Yo he sido candidato por el Estado y así he sido reconocido... en democracia debemos estar dispuestos a aceptar [las críticas], dijo.
A la pregunta de cómo compaginar que él se presentara como candidato a la Corte IDH cuando su país no ha participado en ninguna de las audiencias de los últimos años y el presidente Correa ha llegado al punto de proponer un sistema alterno, Pazmiño contestó que los aspectos de orden político, como es la confrontación del Gobierno contra la CIDH, no le corresponden porque él no es miembro de la Comisión.
Declaró a NTN24 que cuando aceptó la nominación fue porque el Gobierno de su país aceptó su propuesta de buscar mecanismos de diálogo con la CIDH y evitar que las decisiones se politicen.
Sobre las críticas sobre su papel frente a la cuestionada Ley de Comunicación, la ley mordaza para los medios, Pazmiño manifestó que desafortunadamente cuando se han hecho intervenciones políticas para criticar su postulación se ha dicho que participará en la Corte para proteger al presidente Correa, lo que es muestra de ignorancia política o mala fe, porque el estatuto impide que un juez se pronuncie en asuntos de su país de origen.
“En el caso específico, tanto los medios como las personas que se sienten afectadas tienen que acudir a la instancia jurídica pertinente y demostrar que la norma o decisión de un órgano jurisdiccional ha sido vulnerador de derechos”, remarcó.
CRÍTICAS A ZAFFARONI
Pazmiño no fue el único candidato electo que es cuestionado. En la misma posición está el argentino Eugenio Raúl Zaffaroni (que logró 18 votos), quien se desempeñó como juez de la Corte Suprema de Argentina.
Previo a la elección ayer, la asociación civil Usina de Justicia y otras oenegés impugnaron ante la asamblea la candidatura, reportó el diario Clarín.
Entre los argumentos para la impugnación, los grupos incluyeron que Zaffaroni está en una lista, elaborada por las Madres de Plaza de Mayo, de 437 jueces que oficiaron de cómplices de la dictadura.
“De pasado comprometedor, Zaffaroni juró por los estatutos de dos dictaduras, incluido el de la junta militar que ordenó ejecutar a miles de desaparecidos durante los años 70. Jamás firmó un hábeas corpus que hubiese permitido salvar una vida durante la dictadura militar”, aseguró Usina de Justicia en una parte de su sustentación, según Clarín.
Al jurista también se le cuestiona que por su proximidad con el Gobierno asistió como invitado de honor a la entrega de un premio al presidente de Ecuador, por su defensa de la libertad de expresión, a pesar de que Correa es objeto de críticas de los medios de comunicación de su país, que lo acusan de coartar la libertad de prensa y perseguir al periodismo crítico.
El canciller de Argentina, Héctor Timerman, defendió a Zaffaroni: Es “el más importante jurista” del país. “Quienes lo cuestionan son los resabios autoritarios que aún hoy persisten en mi país, apoyados por medios de comunicación que no le perdonan al doctor Zaffaroni haber sido uno de los más grandes defensores de la democracia de los medios en la República Argentina”.
También fueron electos a esta alta Corte, con sede en Costa Rica, el chileno Eduardo Vío Grossi (20 votos) –quien fue reelecto– y la costarricense Elizabeth Odio Benito (20 votos). Se quedó en el camino el candidato de Uruguay, Alberto Pérez Pérez, que intentó reelegirse y solo logró 9 votos.
ALMAGRO NO OPINA
Antes de la votación, el secretario general de la OEA, Luis Almagro, fue consultado sobre la idoneidad de los once postulados para ocho vacantes –cuatro en la CIDH y cuatro en la Corte IDH–, pero evitó pronunciarse, alegando que son los países a los que corresponde elegir a los nuevos integrantes de esos organismos.
Las elecciones de ayer estuvieron precedidas por fuertes críticas por lo que fue calificado como “opacidad y falta de participación ciudadana” en el proceso de elección.
Frente a esta disconformidad, Almagro se comprometió a hacer un esfuerzo para que en el futuro los candidatos comparezcan previamente ante instancias de la OEA y la sociedad civil.
(Con información de las agencias EFE y AP)
Arosemena de Troitiño es electa para la CIDH
La exmagistrada de la Corte Suprema de Justicia Esmeralda Arosemena de Troitiño fue electa como nueva integrante de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Troitiño, quien recibió 25 votos de los Estados miembros de la OEA, fue electa junto a Enrique Gil Botero, de Colombia (26 votos); Margarette May Macaulay de Jamaica (25); y Francisco Eguiguren Praeli, de Perú (26).
Ante la pregunta de NTN24 sobre qué le ha pedido a la comisionada electa de Panamá, la vicepresidenta y canciller de Panamá, Isabel de Saint Malo de Alvarado, expresó que le solicitó que ejerza su papel como corresponde, con independencia, buen criterio y respeto a los derechos humanos.
Los seleccionados integrarán el organismo desde el 1 de enero de 2016 y por cuatro años.
La CIDH está conformada por siete comisionados que no representan a sus países.