"Al escuchar los gritos de clamor de justicia de los jóvenes nicaragüenses que reclaman cívicamente sus derechos y ante el brote de la violencia que enfrenta a los hijos de una misma nación y que perturban la paz de Nicaragua, queremos manifestar públicamente nuestra solidaridad con los obispos y el sufrido pueblo de este país hermano".
Esta fue la reacción del Comité Permanente de la Conferencia Episcopal Panameña (CEP) frente a la crisis que enfrenta Nicaragua, donde violentas protestas, saqueos y choques con la policía han dejado 28 muertos.
El comité permanente manifestó su respaldo al comunicado emitido el pasado 20 de abril de 2018 por la Conferencia Episcopal Nicaragüense –el cual fue dirigido a las autoridades del país centroamericano– en el sentido de escuchar el grito de los jóvenes nicaragüenses y la voz de otros sectores que se han pronunciado al respecto de las reformas al Instituto Nicaragüense de Seguridad Social”.
Asimismo, el comité de la Conferencia Episcopal Panameña indicó que, tal como señalan los obispos nicaragüenses, urge que las autoridades de gobierno reconozcan que la vía para lograr la paz y solucionar los más profundos conflictos es el diálogo, que tienen como centro la dignidad de la persona y el bien común, especialmente de los más vulnerables y empobrecidos”.
#Comunicado | Comité Permanente de la Conferencia Episcopal Panameña. Solidaridad con los obispos, la juventud y el pueblo nicaragüense. pic.twitter.com/IqI4WdgtcO
El documento lleva la firma del arzobispo José Domingo Ulloa, el cardenal y obispo de David José Luis Lacunza, el obispo de Chitré, Rafael Valdivieso Miranda y el obispo de Colón-Guna Yala, Manuel Ochogavía Barahona.
Las violentas protestas contra una polémica reforma al sistema de seguridad social estallaron en Nicaragua el pasado miércoles 18 de abril. Ayer domingo, el presidente Daniel Ortega anunció que revocó las reformas en un encuentro con líderes empresariales.