La Policía Federal (PF) de Brasil investigará el bombardeo masivo de noticias falsas en redes sociales contra los candidatos del balotaje presidencial del próximo 28 de octubre, el ultraderechista Jair Bolsonaro y el izquierdista Fernando Haddad.
El anuncio lo hizo este sábado 20 de octubre el ministro de Seguridad, Raul Jungmann, un día después de que la máxima autoridad electoral autorizara otra investigación, a pedido del partido de Haddad, sobre un supuesto esquema de propagación masiva de noticias falsas por WhatsApp para beneficiar a Bolsonaro.
"Atendiendo la solicitud de la PGR (la fiscal general Raquel Dodge), ordené a la Policía Federal la apertura de la investigación", escribió Jungmann en Twitter.Dodge había solicitado el viernes a la PF que indagara si "empresas de tecnología de la información" han propagado "de forma estructural" noticias falsas contra los dos candidatos.
La fiscal general recordó que esa práctica vulnera la legislación electoral y "tiene un gran potencial dañino" en la opinión de los electores, y afirmó que debería ser investigada "desde la óptica criminal". Pese a los esfuerzos hechos por las autoridades brasileñas, los medios de comunicación y las propias plataformas, nada ha podido evitar que las noticias falsas circulen sin control por las redes sociales.
El jueves, un artículo del diario Folha de Sao Paulo sobre empresas que habrían comprado servicios para propagar mensajes en masa a favor de Bolsonaro, antes de que éste ganara la primera vuelta del 7 de octubre con una ventaja mucho mayor a la prevista por los sondeos, cayó como una bomba sobre la campaña.
Según el rotativo, una campaña similar estaría en marcha para la semana previa al balotaje del 28 de octubre. El Tribunal Superior Electoral (TSE) abrió una investigación, a pedido del partido de Haddad, el Partido de los Trabajadores (PT), y dio un plazo de cinco días a los implicados para presentar su defensa.
WhatsApp dijo por su parte que está "tomando medidas legales inmediatas" para impedir que las empresas envíen ese tipo de mensajes masivos. En Brasil están prohibidos los aportes empresariales a las campañas y lo denunciado por el periódico podría suponer un delito.
El caso elevó la tensión en la ya polarizada campaña electoral brasileña y puso a Brasil en el radar de las tramas políticas tejidas con la ayuda de redes sociales, como ocurrió con las presidenciales en Estados Unidos o el referéndum de salida del Reino Unido de la Unión Europea.
