El régimen del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, supera la cantidad de presos políticos que tiene el gobierno de su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, dio a conocer este sábado 17 de noviembre el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).
Según las cifras del Cenidh la dictadura de Ortega demuestra ser más letal en contra de las protestas ciudadanas que las de Maduro, no solo por cobrar más víctimas mortales, sino también porque ha llenado las cárceles con mayor número de presos políticos en menor tiempo.
El Centro registra 600 presos políticos desde que estalló la crisis en el país centroamericano en abril pasado hasta el 14 de noviembre. Esta cantidad es el doble de los encarcelados por su aliado venezolano.
El régimen de Maduro tenía 243 presos políticos hasta agosto pasado, según reportes de la organización Foro Penal Venezolano, cifra que fue certificada por la Organización de Estados Americanos (OEA).
De los 600 detenidos políticos en Nicaragua (el gobierno solo reconoce a 273), 431 enfrentan procesos en los tribunales, los cuales han sido calificados de “viciados” por los organismos de derechos humanos de ese país. Una de las razones es que las personas fueron detenidas por la Policía y paramilitares del régimen sin orden judicial.
Por otro lado, los familiares de los presos han denunciado que estos sufren torturas y malos tratos en las prisiones, y los abogados defensores afirman que no se respeta el debido proceso y los jueces actúan como verdugos de la dictadura.
El Cenidh informó que 61 ciudadanos han sido condenados por los jueces orteguistas - 55 hombres y 6 mujeres- con condenas que van de los 6 a 90 años de cárcel.
Los presos políticos fueron capturados por protestar contra el gobierno de Ortega y su esposa Rosario Murillo, quien ocupa el cargo de vicepresidenta.
Durante las protestas han sido asesinadas más de 500 personas y han resultado heridas más de 4 mil.
En Venezuela hay presos políticos que llevan hasta 15 años detenidos y algunos han cumplido las condenas impuestas por el régimen de Maduro, quien está en el poder desde 2013, tras la muerte del entonces presidente Hugo Chávez.