El gobierno de Siria aprobó el acuerdo de tregua alcanzado por Rusia y Estados Unidos que debe entrar en vigor el lunes entre el régimen y los rebeldes, informó la agencia oficial Sana, citando "fuentes informadas".
"El gobierno sirio aprobó el acuerdo rusoestadounidense [...], uno de los objetivos del cual es encontrar una solución política para la crisis de Siria", indicó la agencia, precisando que "habrá un cese de las hostilidades en la ciudad de Alepo por razones humanitarias".
El acuerdo prevé, principalmente, un cese de las hostilidades en el conjunto de frentes entre el régimen y los rebeldes, sobre todo en Alepo.
El texto incluye la "desmilitarización" de la carretera de Castello, al norte de Alepo, que constituía una antigua vía de abastecimiento para los rebeldes antes de que el régimen retomara el control de la misma el 17 de julio y asediara la ciudad.
El acuerdo estipula que la ayuda humanitaria llegará a la ciudad a través de esta carretera.
"El gobierno sirio ha estudiado todo el acuerdo y lo ha aprobado", indicaron fuentes no identificadas por Sana.
Anteriormente, la oposición siria en el exilio había indicado en su página web que no había "recibido una copia oficial del acuerdo rusoestadounidense".
Una miembro de la oposición, Bassma Kodmani, se mostró prudente ante al anuncio del acuerdo, que podría desembocar en una colaboración militar inédita entre Estados Unidos y Rusia contra los yihadistas.
Washington debe convencer a los rebeldes de que rompan lazos con los grupos yihadistas aliados en las provincias de Alepo e Idleb (noroeste), principalmente del Frente Fateh Al Sham (antiguo Frente Al Nusra, que se desvinculó de Al Qaeda), pero que sigue estando considerado como un grupo "terrorista" por Moscú y Washington.