Una corte regional en el occidente de Rusia sentenció el miércoles a un Testigo de Jehová danés a seis años en prisión, al parecer la medida más severa contra la libertad religiosa en Rusia en años recientes.
La corte en la ciudad de Oriol halló culpable de extremismo a Dennis Christensen, convirtiéndose en el primer testigo de Jehová en Rusia en ser enviado a prisión.
Christensen fue detenido durante un registro policial a una reunión local de oración que él dirigía en mayo de 2017.
“No estoy de acuerdo con este juicio, es un gran error”, dijo Christensen a la prensa después de ser sentenciado en Oriol.
Su esposa Irina Christensen agregó: “Estoy muy triste que algo así suceda en Rusia, muy triste. Lo mismo podría pasar a cualquiera de nosotros”.
El veredicto fue recibido con consternación en todo el mundo, incluso en la embajada de Estados Unidos que expresó su preocupación y exhortó a Rusia a respetar la libertad religiosa individual.
En años recientes, Rusia ha utilizado ambiguas leyes contra el extremismo para perseguir a disidentes, activistas de la oposición y, más recientemente, a minorías religiosas.
Rusia prohibió oficialmente a los Testigos de Jehová en 2017, cuando declaró que el grupo religioso era una organización extremista.
Casi 100 miembros del grupo se enfrentan a cargos en Rusia y más de 20 de ellos están encarcelados en espera de juicio.
Antes de la prohibición, la sede mundial de los Testigos de Jehová dijo tener unos 170,000 adeptos en Rusia.
