El delicado enfrentamiento diplomático entre Chile y Bolivia debido al centenario pedido de este último por una salida al mar, va a ser un tema tabú para el papa Francisco durante su visita a Chile en enero.
“El Gobierno de Chile pide a toda persona que se abstenga de opinar hasta que se pronuncie el tribunal de La Haya”, un fallo que saldrá a finales de 2018, indicó este martes 7 de noviembre en una rueda de prensa el embajador de Chile ante la Santa Sede, Mariano Fernández, exministro de Relaciones Exteriores.
“Eso lo pedimos no solo al papa Francisco, sino a toda persona, a los amigos, a la opinión pública, que no se pronuncien hasta el fallo, que cumpliremos rigurosamente, sea cual sea”, agregó el veterano diplomático, que estuvo a cargo por 10 años del diálogo con Bolivia.
“La Santa Sede comprende perfectamente eso y no se ha pronunciado sobre ese tema desde la intervención del papa Francisco en Bolivia”, reconoció Fernández.
El presidente boliviano Evo Morales, demandó en 2013 a Chile ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ).
Bolivia perdió en la segunda mitad del siglo XIX, luego de una guerra con Chile, 400 kilómetros de costa y 120 mil kilómetros cuadrados de territorio que lo privaron de un acceso al mar. En la conflagración también participó Perú, como aliado de La Paz.
Durante su viaje a Bolivia en 2015, el papa Francisco consideró que “el diálogo es indispensable” entre los dos países y abogó por soluciones “compartidas, razonables, equitativas y duraderas” tras reconocer que el anhelo de Bolivia es justo.
“Yo no quisiera que la visita se centre en el problema con Bolivia. Eso me da temor, porque si se pronuncia queda inhabilitado para ser mediador”, comentó por su parte el religioso jesuita Fernando Montes, exsuperior de la Compañía de Jesús en Chile y compañero de estudios de Jorge Bergoglio en Argentina.