Los suecos guardaron un minuto de silencio en memoria de las cuatro personas muertas en el ataque de un camión ocurrido la semana pasada en una calle peatonal con comercios de la capital de Suecia, que también dejó 15 heridos.
El nombre del sospechoso detenido fue revelado en documentos de la corte y el Consejo de Seguridad de la ONU condenó el ataque.
Miembros de la realeza sueca, diplomáticos extranjeros y políticos estaban entre la muchedumbre que se congregó en las afueras del ayuntamiento de Estocolmo para un homenaje al mediodía, en el que el primer ministro, Stefan Lofven, dijo que "toda Suecia" simpatizaba con los familiares y amigos de las víctimas.
La Policía arrestó a un hombre de 39 años de Uzbekistán que al parecer era el conductor de camión de cerveza robado con el que se cometió el atentado. Su permiso de residencia fue rechazado el año pasado, pero eludió órdenes de abandonar el país.
El comandante de la Policía regional Jan Evensson dijo a la televisión sueca SVT que el sospechoso "estará tras las rejas el resto de su vida". La Policía también arrestó a una segunda persona pero no dio más detalles al respecto. Los cuatro muertos son dos suecos, un británico y una mujer belga.
Lovfen dijo que los países de origen de las víctimas sufrieron "horribles actos de terrorismo, pero hemos visto también la fortaleza y determinación y el poder de nuestras sociedades democráticas". "Nunca nos rendiremos al terrorismo. Vamos a superar esto juntos", dijo.
El Consejo de Seguridad condenó "el ataque terrorista bárbaro y cobarde" en sus términos más enérgicos y reiteró que "cualquier acto de terrorismo es criminal e injustificable, no importan los motivos, dónde, cuándo y quién los cometa".
El consejo reiteró la necesidad de llevar a los autores ante la justicia. La Casa Blanca dijo en una declaración que el presidente Donald Trump llamó a Lovfen el domingo y "los dos acordaron mantener y fortalecer la ya cercana asociación entre Estados Unidos y Suecia en la lucha global contra el terrorismo".
