Las autoridades electorales de Haití pospusieron este viernes las elecciones presidenciales previstas para este domingo, 24 de enero de 2016, en el país, en medio de protestas callejeras de la oposición y denuncias de fraude electoral.
El presidente del Consejo Electoral Provisorio (CEP), Pierre-Louis Opont, dijo que los comicios fueron suspendidos debido a "razones de seguridad".
La segunda vuelta de las elecciones presidenciales y legislativas parciales estaba prevista para el domingo, pero la oposición organizó varias manifestaciones para denunciar "un golpe de Estado electoral", alegando que estos comicios estarían arreglados de antemano para favorecer al sucesor del oficialismo, Jovenel Moise.
Pierre-Louis Opont justificó la anulación de las elecciones, a menos de 48 horas de su inicio previsto, debido al "conjunto de incidentes y de actos violentos contra la infraestructura del consejo".
Varios puestos de votación fueron incendiados en el interior del país durante la noche del jueves al viernes, y en la capital, Puerto Príncipe, multitudes protestaron incendiando automóviles y enfrentándose a la policía. Se denunció además que miembros del CEP fueron atacados.
En la primera vuelta de la elección presidencial el 25 de octubre, el candidato oficialista Jovenel Moise recibió 32.7% de los votos, contra 25.29% para el opositor Jude Celestin.
En esa votación, muchas sedes estuvieron cerradas debido a disturbios o fraudes electorales y hubo reducida participación para sufragar.
Por lo que tras conocerse los resultados, el opositor se negó a hacer campaña así como a participar en las elecciones del domingo.
"El día 24, es 'No'", dijo Celestin a la AFP esta semana. "No voy a tomar parte en esta farsa, que será una selección no una elección, pues habrá un solo candidato."
El gobierno permitió que una comisión independiente reunida apresuradamente revise las papeletas, pero la oposición no modificó su postura, lo que resultó en el estallido de las protestas.
El país más pobre de las Américas había marcado la convocatoria a las urnas para elegir al sucesor del presidente Michel Martelly y buscar una salida a la profunda crisis política que atraviesa.
Pero activistas de la oposición temen que la votación sea sesgada para que favorezca al delfín de Martelly, Jovenel Moise, y su candidato Jude Celestin está boicoteando los comicios.
La suspensión de las elecciones haría volar las ambiciones de Estados Unidos, un socio clave para Haití , cuya administración ha respaladado la celebración de la votación a pesar de la violencia. Martelly, quien denunció las protestas y acusó a la oposición de intentar desestabilizar el país, tenía previsto dar un mensaje a la población en cadena nacional.
El excantante popular tiene prohibida la reelección y se ha prometido de entregar al poder a su sucesor el 7 de febrero, respetando la Constitución.