Un exelemento de una fuerza especial de la Marina que participaba en las labores para rescatar a niños atrapados en una cueva ha muerto por falta de oxígeno, informaron autoridades este viernes 6 de julio.
El comandante de la fuerza SEAL, Arpakorn Yookongkaew, dijo en conferencia de prensa que el rescatista laboraba como voluntario y que murió durante una misión nocturna en la que estaba colocando tanques de oxígeno.
Mientras estaba bajo el agua, relató, el rescatista perdió el conocimiento y no pudo ser reanimado. “A pesar de esto, continuaremos hasta cumplir nuestra misión”, declaró Arpakorn.
Las autoridades tratan de bombear el agua de la caverna inundada donde 12 menores y su entrenador de fútbol han estado atrapados desde el pasado 23 de junio.
De momento, un buzo experimentado necesita 11 horas para hacer un viaje de ida y vuelta hasta donde están los niños: seis de ida y cinco de vuelta gracias a la corriente. El recorrido es de varios kilómetros e incluye pasos angostos y tramos bajo el agua.