Estados Unidos expresó este lunes su "profunda preocupación" por la decisión de la justicia venezolana de ratificar la sentencia a casi 14 años de prisión contra el opositor Leopoldo López.
"Estados Unidos está profundamente preocupado por la decisión de una Corte de Apelaciones de Venezuela de permitir que la injusticia contra el preso político Leopoldo López continúe", dijo Elizabeth Trudeau, portavoz del Departamento de Estado.
Trudeau reiteró los llamados de Washington a Caracas para "garantizar los derechos de López y todos los presos políticos" a tener un "juicio justo, público e imparcial", de acuerdo a la Carta Democrática Interamericana y la Constitución venezolana.
El pasado viernes, la corte resolvió confirmar la condena ante un recurso que presentó el líder del partido Voluntad Popular contra la sentencia a 13 años y nueve meses de prisión que le fue impuesta en septiembre de 2015.
Preso desde febrero de 2014, López fue declarado culpable de incitar a la violencia durante manifestaciones ocurridas ese año, que buscaban la renuncia del presidente Nicolás Maduro y durante las cuales ocurrieron 43 muertes.
Al subrayar que las acusaciones "no están sustanciadas" y son "motivadas políticamente", Trudeau reiteró el llamado de Estados Unidos a la liberación de López y de los demás dirigentes opositores en prisión.
"En vez de silenciar a la disidencia pacífica y democrática, éste es el momento para que los dirigentes venezolanos escuchen las diversas voces y trabajen juntos en busca de soluciones a los desafíos sociales y económicos del pueblo venezolano", dijo a periodistas en Washington.
El diario The New York Times también se refirió este lunes a Venezuela, evocando en su editorial un "autoritario Estado paria" convertido en la más "urgente bomba de tiempo" del continente.
Bajo el titular, "Inminente choque en Venezuela", el periódico neoyorquino señaló que el país petrolero "debe ser llamado por lo que es: un corrupto y autoritario Estado paria que se ha convertido en la más urgente bomba de tiempo del hemisferio".
Para el diario, el anuncio la semana pasada de las autoridades electorales, dando señales de que el referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro no se realizará este año, "pone a Venezuela en una peligrosa -y evitable- ruta de colisión".
La oposición exige que la consulta se realice antes del 10 de enero de 2017, pues si Maduro pierde se debe llamar a elecciones. Pero si es revocado después de esa fecha, su vicepresidente completará los dos años restantes de mandato.
Según el New York Times, "evitar una confrontación entre el gobierno venezolano y aquellos que buscan sacar a Maduro, que bien podría tornarse violenta, requerirá el apoyo internacional a ciudadanos comunes que luchan por derrocar a un líder despótico".
Pero hasta ahora los líderes en la región solo han ofrecido "lugares comunes, llamando al diálogo y el respeto de los derechos humanos", apuntó el diario.
Estados Unidos, junto a otros 14 países de la Organización de Estados Americanos, suscribió la semana pasada un comunicado llamando a que "se cumplan de manera clara, cierta y sin demora las etapas" del referendo.