La oficialista Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela retiró la noche del martes la inmunidad parlamentaria al líder opositor y jefe del Congreso, Juan Guaidó, lo que le abre el camino a las autoridades para enjuiciarlo y detenerlo.
Al grito de “¡eso es justicia, justicia popular!” los constituyentes aprobaron el retiro del fuero a Guaidó por solicitud del Tribunal Supremo de Justicia, que la víspera anunció que lo procesaría por desacatar en febrero una decisión que le prohibía salir del país.
El presidente de la Constituyente, Diosdado Cabello, anunció al final de una sesión, que se extendió por más de dos horas, la aprobación de un decreto constituyente que autorizó el retiro de la inmunidad al jefe del Congreso para proseguir una investigación penal en su contra.
“Que hoy la justicia esté funcionando nos debe llenar de esperanza”, afirmó Cabello durante la sesión al defender la decisión contra Guaidó, al que identificó como la “nada”.
El dirigente oficialista sostuvo que la Constituyente debió decidir el retiro del fuero porque la Asamblea Nacional “no existe” debido a que está “en desacato” de las decisiones del Poder Judicial.
Ahora, sin ningún tipo de protección constitucional, el dirigente opositor de 35 años puede ser juzgado y enfrentar una eventual detención, lo que dejaría a la oposición sin su principal figura y motor de las recientes protestas antigubernamentales que han exacerbado las tensiones contra el presidente Nicolás Maduro en el inicio de su segundo sexenio.
La Constitución garantiza la inmunidad para el presidente, los diputados y demás funcionarios electos por voto popular y prevé que para retirarles el fuero deben ser sometidos previamente a un antejuicio de mérito ante el Tribunal Supremo de Justicia. Y de acuerdo con la carta magna, el Congreso es la instancia que debe aprobar el retiro de la inmunidad de un diputado.
Las acciones del Tribunal Supremo y la Constituyente fueron rechazadas por algunos juristas y opositores que aseguraron que en el caso de Guaidó no se cumplieron los parámetros legales.
Guaidó afirmó este martes que nada lo detendrá en su empeño por sacar del poder al presidente Nicolás Maduro, en su primera reacción luego de que lo despojaran de su inmunidad parlamentaria.
"El pueblo está determinado y nada nos va a detener, ellos solo ganan un poquito de tiempo que lo pierde el venezolano en horas sin luz, sin agua, con pérdidas humanas. No hay vuelta atrás en este proceso", dijo Guaidó ante un grupo de partidarios y periodistas.
Hasta ahora el gobierno no había tomado ninguna acción concreta contra Guaidó aunque en las últimas tres semanas, el jefe del Congreso había enfrentado una serie de presiones luego del arresto de su jefe de despacho y mano derecha, Roberto Marrero, quien fue señalado de integrar una supuesta célula terrorista, y la decisión que tomó la Contraloría General de la República de inhabilitarlo para ejercer cargos públicos por 15 años por supuestamente ocultar o falsear datos en su declaración jurada de bienes.
A mediados de marzo el fiscal general, Tarek William Saab, un exmilitante del oficialismo, anunció la apertura de un segundo proceso contra Guaidó por su "presunta implicación en el sabotaje realizado al sistema eléctrico nacional".
A finales de enero, el Ministerio Público abrió un primer proceso al dirigente opositor por "diversos acontecimientos violentos" que hasta la fecha no han sido precisados.