La canciller de Colombia, María Ángela Holguín, criticó a los organismos regionales y mostró su decepción por la posición que adoptaron sus miembros ante la crisis fronteriza con Venezuela, luego de que representantes ante la Organización de Estados Americanos (OEA) rechazaran convocar una reunión extraordinaria de cancilleres y los de Unasur pospusieran un encuentro similar.
Holguín aseguró que Colombia planea acudir a la ONU para que aborde la crisis, sin cerrar la puerta a una cita bilateral con Maduro.
Confesó además que el país se siente “solo” luego de lo ocurrido en las instancias regionales y expresó su sorpresa por la postura de Panamá, que cambió su voto en el último minuto.
LLEVARÁ CONFLICTO FRONTERIZO A LA ONU
Colombia se mostró ayer decepcionada con los organismos regionales por su posición ante la crisis fronteriza con Venezuela, luego de que los miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) rechazaran convocar una reunión extraordinaria de cancilleres y Unasur pospusiera una cita similar.
El gobierno de Juan Manuel Santos descartó asistir a una cita en el seno de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) si esta no tiene lugar esta semana, por considerar que sería tarde para tratar la situación humanitaria que ha afectado a más de 11 mil colombianos, según la ONU.
“Habíamos dicho que queríamos (una reunión de) Unasur esta semana porque queríamos hacer el debate y mostrar lo que está pasando, si esta semana no es Unasur, ya no creemos que vale la pena”, dijo la canciller María Ángela Holguín en declaraciones a una radio colombiana.
La cita de ministros de Relaciones Exteriores de Unasur había sido anunciada por Bogotá para mañana jueves en Quito, sede del organismo regional, pero fue aplazada el lunes porque la canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, está de gira con el presidente Nicolás Maduro por China y Vietnam.
Holguín dijo que si su homóloga no abandona la gira para asistir el jueves a Unasur, significa que “no le parece que realmente es importante lo que está pasando”, por lo que el debate ante ese organismo sería aun más innecesario.
La diplomacia colombiana sufrió un doble revés el lunes, pues además de anunciarse la postergación del encuentro de Unasur, los miembros de la OEA rechazó convocar una reunión de cancilleres solicitada por Bogotá para tratar las denuncias de “violación de derechos humanos” en medio de la actual crisis.
En contraste con la posición colombiana, Maduro dijo ayer desde Beijing estar “ansioso” de que se produzca la reunión de Unasur para tratar la crisis fronteriza.
La tensión entre Bogotá y Caracas comenzó el 19 de agosto con el cierre de algunos pasos fronterizos por parte de Maduro tras un ataque de desconocidos a militares venezolanos que realizaban una operación anticontrabando, y que el mandatario venezolano atribuyó a “paramilitares colombianos”.
Desde entonces, Venezuela ha deportado a unos mil 100 colombianos, mientras que otros 10 mil han cruzado la frontera por temor a ser expulsados, ser separados de sus familiares y perder sus pertenencias, según detalló el lunes la Organización de Naciones Unidas (ONU).
La crisis se profundizó aun más cuando ambos países llamaron a consultas a sus embajadores el 27 de agosto.
“Sobran las pruebas de la guerra contra la economía venezolana, del contrabando, del paramilitarismo”, agregó Maduro.
Maduro ha justificado las deportaciones aduciendo que esos colombianos estaban vinculados al paramilitarismo, un argumento que Colombia ha negado en reiteradas ocasiones.
COLOMBIA PLANTEA IR A LA ONU
El desencanto colombiano con los organismos regionales fue señalado por Holguín en declaraciones a medios locales, donde asomó como alternativa acudir formalmente a la ONU para que aborde la crisis, sin cerrar la puerta también a un encuentro bilateral con Maduro.
“Usted ve estos organismos internacionales y usted piensa: tanta cosa y tantos recursos que cuestan y en el momento de una crisis desaparecen”, dijo la jefe de la diplomacia colombiana sobre la OEA y Unasur.
La canciller confesó además que el país se siente “solo” luego de lo ocurrido en las instancias regionales y dijo que ahora evalúa llevar el problema al Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
“Yo sí creo que esto hay que llevarlo (a la ONU), independientemente que uno haga una reunión bilateral” con Maduro, destacó Holguín, asegurando que el mandatario venezolano ha planteado esta posibilidad a través de terceros países.
Sobre el revés sufrido el lunes en la OEA, donde Colombia consiguió 17 de los 18 votos necesarios para que el tema fuera discutido por los cancilleres de los países miembro, Holguín sostuvo que naciones como Haití votaron en contra porque viven del petróleo venezolano. No obstante expresó su sorpresa por la postura de Panamá que, según dijo, cambió su voto en el último minuto.
“Quienes se comprometieron a apoyarnos cambiaron el voto”, enfatizó.
Holguín manifestó que “para nadie es un secreto el manejo de Venezuela con el Caribe. Petrocaribe (empresa pública venezolana que provee petróleo en condiciones preferenciales a los países caribeños) es una industria que mueve mucho voto en el Caribe y aun así decidimos correr el riesgo para visibilizar el tratamiento que los colombianos han sufrido en su expulsión de Venezuela”.
HABLA VARELA
En un intento por aclarar su voto, el gobierno de Juan Carlos Varela planteó que un escenario polarizado no ayudaría en nada a la crisis colombo-venezolana.
Varela confirmó que tuvo una conversación minutos antes de la votación en la OEA con ambos presidentes.
“Nosotros conversamos con el presidente Maduro y tuvimos una llamada de inmediato con el presidente Santos y la canciller nuestra (Isabel de Saint Malo de Alvarado) se mantuvo en comunicación con ambas cancilleres, de Venezuela y Colombia, para que se pueda trabajar lo antes posible si se tiene la voluntad en esa reunión bilateral”, explicó.
“Panamá considera que en este tipo de conflicto la búsqueda de consenso es la vía correcta, no la polarización ni la división”, señaló la Cancillería panameña.
OPOSICIÓN COLOMBIANA
En tanto, la oposición colombiana, encabezada por el partido del expresidente Álvaro Uribe (2002-2010), ha pedido la dimisión de Holguín ante lo que consideró una “pobre” defensa de los colombianos, escribió en Twitter el senador uribista Alfredo Rangel
La senadora colombiana Claudia López, del Partido Verde, criticó ayer al presidente Juan Manuel Santos por reclamar solidaridad continental con sus compatriotas deportados de Venezuela cuando mantiene silencio ante los atropellos que sufre la oposición de ese país.
“Santos ha tolerado la violación de derechos de ciudadanos venezolanos; ahí pavimentó la violación de derechos de colombianos en Venezuela”, señaló la parlamentaria en un mensaje en su cuenta en Twitter.
Por su parte, el alcalde de la ciudad colombiana fronteriza de Cúcuta, Donamaris Ramírez Lobo, anunció ayer que interpondrá una denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) contra el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, por la crisis humanitaria generada en la frontera común.
CIDH SE PRONUNCIA
El secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Emilio Álvarez Icaza, dijo que Venezuela debe cesar las deportaciones colectivas y advirtió que no se ajustan al derecho internacional. Pidió a Venezuela respetar el debido proceso de los colombianos, según información difundida por la televisora NTN24.
(Con información de agencias internacionales y de Eduardo Mendoza)
