Representantes del gobierno y la oposición venezolana anunciaron este sábado 12 de noviembre de 2016 que se mantendrán sentados en una mesa de negociación, en aras de llegar acuerdos que permitan resolver la grave crisis económica y social que atraviesa la nación sudamericana.
Así lo anunció el obispo Claudio Maria Celli, enviado del Vaticano, al leer un comunicado sobre la segunda reunión plenaria, que empezó el viernes y continuó este sábado entre ambas partes.
"El gobierno y la Mesa de Unidad Democrática (MUD) asumieron el compromiso de poner en práctica una hoja de ruta que permita normalizar los poderes del Estado, el respeto recíproco y que contribuyan a mejorar las condiciones de abastecimiento de la población”, dijo Celli.
Ambas partes también decidieron "priorizar" en el corto plazo medidas para mejorar el abastecimiento de medicamentos y alimentos, además de promover políticas de cooperación para controlar los mecanismos de adquisición y distribución de insumos, según el enviado del Vaticano.
En el campo político se acordó avanzar en el nombramiento de los dos rectores que culminan su mandato en diciembre de 2016 en el Consejo Nacional Electoral, organismo fuertemente criticado por la organización luego de que suspendiera el revocatorio contra Nicolás Maduro tras acusaciones de fraude en la primera recolección de firmas.
Comunicado de la Unidad Democrática tras la segunda reunión de la Mesa de Diálogo #12Nov #Dialogo https://t.co/oWmR1njY3e pic.twitter.com/k5udDStEdC
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— Unidad Venezuela (@unidadvenezuela) November 12, 2016
Celli, durante su pronunciamiento, no se refirió a la exigencia de la MUD para la reactivación de este referendo revocatorio contra Maduro.
También se acordó el desarrollo de nuevas elecciones en el estado Amazonas para seleccionar a los tres diputados de ese territorio ante la Asamblea Nacional, luego de que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) destituyera a los inicialmente elegidos por supuesta compra de votos.
A su vez, se respetará la autonomía del legislativo venezolano, por lo que partes avanzarán "en la superación de la situación de desacato (en la que se encuentra) la Asamblea Nacional" tras un dictamen del TSJ. Esta medida ha anulado y dejado carentes de toda vigencia y eficacia jurídica los actos legislativos del congreso venezolano, de mayoría opositora.
Los representantes de la oposición informaron que habían conseguido construir acuerdos respecto a las "liberaciones de personas detenidas". Pero no entregaron detalles sobre este anuncio ni precisaron a quiénes exactamente cobijaba ese acuerdo.
Además, con el propósito de reforzar institucionalmente el diálogo se decidió incorporar a la mesa a un gobernador por cada una de las partes e invitar a representantes de diversos segmentos de la sociedad.
El nuevo encuentro entre el gobierno y sus opositores se produjo 11 días después de la primera reunión plenaria, auspiciada por el Vaticano y en la que también actúan los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero, de España; Martín Torrijos, de Panamá, y Leonel Fernández, de República Dominicana, en representación de la Unasur.
Después de que el enviado del Papa Francisco dio lectura a las conclusiones de la reunión, Héctor Rodríguez, en representación del gobierno, y Carlos Ocariz, como delegado de la MUD, leyeron la declaración conjunta denominada Convivir en Paz, en la cual se comprometieron a acción política respetuosa, dentro del marco constitucional y electoral.
La próxima reunión plenaria se llevará a cabo el 6 de diciembre próximo.
Los venezolanos sufren una grave crisis económica, con una severa escasez de alimentos y medicinas, así como una inflación que el FMI calcula en 475% para 2016.
(Con información de AP)
