Un grupo de manifestantes afuera de la Corte Suprema de Estados Unidos para homenajear a la fallecida jueza progresista Ruth Bader Ginsburg abucheó este jueves al presidente Donald Trump, que acudió a presentar sus respetos a la magistrada.
La multitud gritó “voten para sacarlo”, en referencia a las próximas elecciones del 3 de noviembre y “honren su deseo”, en relación a la última voluntad de Ginsburg, que pidió que sea el gobierno resultante de los comicios quien nombre a su reemplazante.
Trump llegó al tribunal en torno a las 10H00 (14h00 GMT) acompañado de la primera dama Melania, ambos con mascarilla negra.
Allí guardó un minuto de silencio y partió raudo; pocos minutos después ya estaba de vuelta en la Casa Blanca.
Este desplazamiento es poco habitual en el mandatario, que nunca participa de los homenajes de personalidades que no son de su campo político.
El mandatario anunció que va a nombrar a la reemplazante de Ginsburg en el alto tribunal antes de las reñidas elecciones de noviembre, desatando la indignación de la oposición demócrata.
“Creo que todo va a andar muy bien, que va a ir muy rápido”, dijo Trump a Fox Radio este jueves. “Tenemos a cinco mujeres en la lista y todas me gustan”, agregó el mandatario, que ya adelantó que entre las finalistas está la magistrada conservadora Bárbara Lagoa, una jueza de Miami de origen cubano.
Hasta la muerte de Ginsburg, los conservadores tenían una mayoría de cinco frente a cuatro en el tribunal que decide sobre asuntos de la vida de los estadounidenses, como el derecho a portar armas, el derecho al aborto, pero también toca asuntos migratorios y temas como el acceso a la salud.