El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil homologó este sábado el acuerdo de colaboración premiada con la Justicia del teniente coronel Mauro Cid, exedecán del expresidente Jair Bolsonaro, y ordenó su libertad condicional.
El magistrado Alexandre de Moraes, consideró que el acuerdo entre la defensa de Cid y la Policía Federal, se enmarca dentro de la “regularidad y legalidad” previstas para la “adecuación de los beneficios pactados”, los cuales no fueron especificados.
Los “resultados de colaboración a la exigencia legal y manifestación de voluntad” por parte del acusado deberán “producir efectos jurídicos y legales”, resaltó el magistrado en una segunda decisión, posterior a la que concedió la libertad condicional de Cid.
En prisión desde mayo pasado, Cid, según medios locales, entregará informaciones privilegiadas a la Justicia sobre las investigaciones contra Bolsonaro (2019-2022) en la trama de las joyas que recibió durante su mandato y que se apropió de forma irregular.
De igual manera, de acuerdo con los medios, declarará suministrando nuevas informaciones en los casos de la adulteración del certificado de vacunación anticovid del exmandatario, familiares y allegados y sobre el intento golpista de la ultraderecha.
No obstante, sin mencionar específicamente el caso de Cid, el procurador general de la República, Augusto Aras, se pronunció este sábado en su perfil de X (antiguo Twitter) sobre la homologación de los acuerdos con la Policía Federal y no con la Fiscalía.
“La Procuraduría General de la República (PGR) no acepta delaciones conducidas por la Policía Federal, como las de (el exministro de Hacienda) Antonio Palocci y de (el exgobernador de Río de Janeiro) Sérgio Cabral, por ejemplo”, escribió Aras.
Palocci y Cabral, sin consentimiento del Ministerio Público (Fiscalía), tuvieron acuerdos de colaboración con la Policía Federal homologados por la Justicia para reducir sus penas en el marco de la operación anticorrupción Lava Jato.
En la primera decisión de este sábado, sobre la libertad condicional, De Moraes consideró que tras la “conclusión de numerosas diligencias” por parte de la Policía Federal y las tres audiencia del investigado era “innecesario” mantener la prisión preventiva.
Para el magistrado, “ya no se da ninguna de las hipótesis excepcionales y razonablemente previstas en la legislación” para justificar la privación de la libertad del exedecán para “efectos de investigación criminal”.
Cid recibió así la libertad condicionado al cumplimiento de una serie de medidas cautelares, como el uso de una tobillera electrónica, retención del pasaporte y separación de sus funciones en el Ejército.
El exedecán es considerado como una pieza clave en el caso del conjunto de joyas y objetos de gran valor que le fueron obsequiados a Bolsonaro en Arabia Saudí y otros países cuando aún gobernaba y que debió haber entregado al acervo del Estado al dejar el poder.
Según las investigaciones, Bolsonaro, a través de intermediarios, vendió algunas de esas joyas, aunque algunos de sus colaboradores las recompraron una vez que el Estado exigió su devolución.
Una eventual confesión de Cid puede complicar aún más la ya delicada situación jurídica de Bolsonaro.
El líder de la ultraderecha es investigado en varias causas civiles y penales, entre ellas por la asonada golpista del 8 de enero, cuando miles de sus simpatizantes invadieron las sedes de los tres poderes.