Más de 3.000 militares de diversos cuerpos y regimientos desfilaron en el cortejo fúnebre tras el solemne funeral de Estado de Isabel II, celebrado en la abadía de Westminster ante cientos de dignatarios mundiales.
La procesión fúnebre de Isabel II recorrió este lunes el centro de Londres tras el funeral, celebrado con toda la solemnidad y la pompa para honrar a la reina, fallecida el 8 de septiembre, a los 96 años de edad.
La Real Policía Montada de Canadá encabezó la marcha del cortejo fúnebre de Isabel II a la salida de la abadía de Westminster, al término del funeral, de camino hacia el arco de Wellington, donde sus restos se transfirieron a un coche fúnebre para llevarla al castillo de Windsor, a las afueras de Londres.
Tras escucharse el himno nacional Dios salve al Rey, con que concluyó el servicio religioso en Westminster, el ataúd de la soberana, colocado sobre una cureña de la Marina, fue tirado por más de cien marineros al son de las gaitas de regimientos escoceses e irlandeses, que llevaban sus coloridos trajes de ceremonial.
El féretro abandonó el templo a las 12:15 p.m. (6:15 hora de Panamá) hacia el arco de Wellington, en la esquina sureste de Hyde Park, mientras el Big Ben, la célebre campana de la torre del palacio de Westminster, sonó a intervalos de un minuto durante la procesión.
En esta marcha también desfilaron miembros de las fuerzas armadas del Reino Unido y países de la Mancomunidad Británica de Naciones (Commonwealth), representantes de la policía británica y del servicio de salud pública (NHS, en inglés).
El ataúd, cubierto por el Estandarte Real, la corona del Estado Imperial, el cetro de la soberana y una corona de flores multicolores, iba seguido por los hijos de Isabel II, el rey Carlos III, la princesa Ana, el príncipe Andrés y el príncipe Eduardo. Inmediatamente detrás, el príncipe Guillermo, el príncipe Harry y el hijo de la princesa Ana, Peter Phillips, además de otros familiares directos como Tim Lawrence (esposo de la princesa Ana), Lord Snowdon (hijo de la fallecida princesa Margarita) o el duque de Gloucester.
La reina consorte Camila y la princesa Kate, junto con Guillermo y Charlotte (hijos mayores de los príncipes de Gales) siguieron el cortejo en un vehículo. En otro coche iban Meghan Markle, duquesa de Sussex, y otros miembros de la familia real británica.
En un día ligeramente soleado en la capital británica, miles de personas se han colocado a ambos lados del recorrido de la procesión, en un ambiente de profundo silencio.
Una vez en Windsor, la procesión a pie recorrerá los 5 kilómetros del Long Walk, la característica avenida arbolada que desemboca en la residencia real.
A las 16:00 hora local (10:00 a.m. hora de Panamá), se celebrará un servicio religioso ante unos 800 invitados en la capilla de San Jorge del castillo, lugar habitual de bautizos, bodas y funerales reales. En los últimos años, acogió el enlace entre el príncipe Enrique y Meghan, así como el funeral del príncipe Felipe, esposo de la reina.
A las 19:30 hora local (1:30 p.m. hora de Panamá), Isabel II será enterrada junto a los restos de su esposo en la cripta de la capilla.