El Grupo Egmont ha suspendido temporalmente el acceso de Colombia a su plataforma segura de intercambio de información, luego de que el pasado 22 de septiembre, una investigación realizada por Señal Colombia en colaboración con la Revista Raya destapó nuevos detalles sobre la adquisición del software espía israelí Pegasus por parte del Gobierno del expresidente Iván Duque (2018-2022).
La decisión de Egmont se dio a conocer en el programa del canal RCN, La Mesa Ancha.
Según la carta del grupo, las Unidades de Inteligencia Financiera (FIU por sus siglas en inglés) “deben preservar su autonomía e independencia operativa, manteniéndose libres de influencias políticas, gubernamentales o industriales”.
El Grupo Egmont de Unidades de Inteligencia Financiera es una organización internacional que facilita la cooperación y el intercambio de inteligencia entre unidades nacionales de inteligencia financiera para investigar y prevenir el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo.
Aseguran que la protección de la información financiera sensible es fundamental para garantizar que el intercambio de inteligencia no se vea comprometido, lo cual pondría en riesgo a otras UIF y podría obstaculizar los esfuerzos globales contra el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo.
Por su parte, el presidente Gustavo Petro, cuestionó al medio de comunicación aludiendo que “es su estrategia hablar de Egmont para tapar Pegasus”.
Es su estrategia hablar de Egmont para tapar pegasus. Egmont nos sanciona transitoriamente porque revelamos la verdad de pegasus.
— Gustavo Petro (@petrogustavo) September 24, 2024
Es decir, porque un gobierno compró ilegalmente con lavado de activos pegasus y con él, interceptó ilegalmente para asesinar jóvenes en el estallido… https://t.co/ESxBFqT2TZ
Según la investigación, en 2021 se realizó una transacción entre el Ejecutivo colombiano y la empresa NSO Group, responsable de Pegasus, por un monto de 11 millones de dólares. Este dinero habría sido transportado en un vuelo chárter de Bogotá a Tel Aviv y depositado en el Banco Hapoalim, en Israel.
Jorge Lemus, director de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI), confirmó en el reportaje que esta operación podría calificarse como un caso de lavado de dinero.
Según el informe, el dinero utilizado en la transacción provendría de fondos incautados al narcotráfico y no habrían sido reportados ni a la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) ni a las autoridades aduaneras colombianas.