El responsable de Medios del grupo libanés chií Hizbulá, Mohamed Afif, afirmó este viernes que su formación “está bien” y su prioridad es “derrotar por la fuerza al enemigo” israelí, si bien “agradece cualquier esfuerzo para poner fin a la agresión” contra el Líbano.
“Nuestra prioridad absoluta ahora es derrotar al enemigo y obligarle por la fuerza a cesar la agresión”, dijo Afif en una rueda de prensa en Beirut, en la que aseguró que su grupo y su arsenal de armas “están bien.
Subrayó que “sin embargo, cualquier esfuerzo interno o externo para poner a la agresión será agradecido siempre que sea compatible con nuestra visión integral de la batalla, sus circunstancias y sus resultados”.
El responsable del grupo proiraní insistió al mismo tiempo en que “la resistencia está bien (...) su reserva estratégica está bien y tiene miles de combatientes preparados y dispuestos a martirizarse en defensa del Líbano”.
#HCHInternacionales | En el reciente ataque aéreo israelí contra la sede de Hizbulá, varias fuentes estiman que fueron destruidas la mayoría de sus reservas de efectivo y oro, causando pérdidas de 1.500 millones de dólares en efectivo y derritiendo 2.000 libras de oro.… pic.twitter.com/ACGqPoUCX8
— HCH Televisión Digital (@HCHTelevDigital) October 11, 2024
Afirmó asimismo que las tropas israelíes “enemigas” enviadas a la frontera para unas operaciones terrestres en el sur del Líbano “no pueden avanzar hasta ahora y sus tanques aún siguen posicionados en la retaguardia”.
Afif criticó por otro lado a “algunos medios de comunicación” libaneses que -dijo- “transmiten las noticias y las declaraciones del enemigo sin verificarlas”, así como a “aquellos que critican a la resistencia” al considerar que “alimentan la guerra psicológica contra la resistencia”.
Sus declaraciones llegan después de que el primer ministro libanés, Najib Mikati, pidiera este viernes al Consejo de Seguridad de la ONU que tome una decisión para un “alto el fuego inmediato y completo” en el Líbano.
Mikati aseguró tras una reunión del Consejo de Ministros que su Gobierno está dispuesto a desplegar al Ejército libanés en el sur del país en conformidad con la resolución 1701 de la ONU, que puso fin a la guerra de 2006 entre Líbano e Israel, y aseguró que “Hizbulá está de acuerdo”.
Esa resolución establece que en la franja fronteriza solo pueden desplegarse las fuerzas armadas libanesas, por lo que los milicianos de Hizbulá apostados junto a la divisoria con Israel deberían retirarse hacia el norte, por encima del río Litani. También se estipula el desarme de esa formación chií.