Nuevos incendios se esperan en la inundada planta química Arkema ubicada al noreste de Houston, advirtió un ejecutivo de la empresa este jueves 31 de agosto después de que explosiones nocturnas provocaran una humareda en el lugar, devastado por la tormenta Harvey.
Richard Rennard, que dirige una de las filiales del grupo francés Arkema, dijo que los operadores de la planta en Crosby, a unos 40 kilómetros de Houston, anticipan nuevos incendios en los otros ocho contenedores que tienen productos químicos que aún no han comenzado a degradarse.
“Esperamos ciertamente que en los otros ocho contenedores ocurra lo mismo”, dijo en rueda de prensa, aunque señaló que es imposible determinar cuándo.
El incendio se generó en un contenedor por la degradación de peróxido orgánico sin refrigerar debido a las inundaciones causadas por Harvey, que cortaron la electricidad y dañaron los generadores de emergencia.
Arkema fabrica peróxidos orgánicos, un compuesto utilizado en la elaboración de plásticos y productos farmacéuticos.
Rennard explicó que el humo provocado por estas reacciones químicas es “irritante” para los ojos y los pulmones y alentó a quienes puedan haberlo inhalado a ver a un médico. “El humo es nocivo, la toxicidad es una cosa relativa”, dijo, sin dar más detalles.
Más temprano, el director de la Agencia federal para la gestión de emergencias, Brock Long, dijo a periodistas que “este humo es extremadamente peligroso”.
Ed Gonzalez, jefe de policía del condado de Harris, que incluye a Houston, explicó que respirar estos vapores equivalía a inhalar el humo de un fuego de campamento.