El Ejercito de Israel mantiene fuertes combates con el grupo islamista Hamás en el norte de Gaza, a la vez que prosigue su ofensiva por el sur de la Franja palestina.
Las fuerzas israelíes informaron este sábado de intensos enfrentamientos en la ciudad de Gaza, en el norte del enclave palestino, donde sus tropas se enfrentaron “a una célula terrorista” en la zona de una escuela en el barrio de Shejaiya.
“Se produjeron intercambios de disparos en los que murieron todos los terroristas de la célula” y las tropas localizaron rifles AK-47, granadas y municiones “dentro de las aulas”, según un comunicado castrense.
Israel acusa repetidamente al grupo islamista Hamás de utilizar centros educativos y médicos, entre otras instalaciones civiles, para ocultarse.
Además, en ese barrio de Gaza tropas terrestres israelíes atacaron en un túnel que “formaba parte de una extensa ruta subterránea”, donde encontraron “numerosas armas y un ascensor”, de acuerdo con esta fuente.
Igualmente, “identificaron a varios terroristas armados con misiles antitanques que se acercaban a las tropas en la zona”, por lo que pidieron a un helicóptero que atacara, evitando que abrieran fuego contra las tropas israelíes, añadió.
El Ejército israelí destacó que en la zona de Beit Hanoun, también en el norte de la Franja, atacó “a terroristas que dispararon desde una escuela de la UNRWA -la agencia de la ONU para los refugiados palestinos- y una mezquita”.
Asimismo, tropas navales israelíes atacaron infraestructura y embarcaciones “utilizadas con fines terroristas”, según el comunicado.
Más un centenar de personas murieron y más de doscientas resultaron heridas en las últimas horas en distintas partes de Gaza por ataques del Ejército israelí, informó el Ministerio de Sanidad en la Franja, controlado por Hamás.
A la vez que combate en el norte de Gaza, el Ejército de Israel intenta controlar en el sur Jan Yunis, que considera el “bastión” de Hamás en la Franja, en su ofensiva contra el grupo islamista.
La guerra estalló tras un ataque de Hamás a Israel ese día, que causó más de 1,200 muertos y la captura de al menos 240 personas, llevadas como rehenes a Gaza.