El expresidente brasileño Jair Bolsonaro dejó este jueves el hospital de São Paulo donde fue ingresado en la víspera para someterse a unos exámenes médicos de rutina.
Bolsonaro, de 68 años, salió del Hospital Vila Nova Star de São Paulo sin dar declaraciones a los periodistas que estaban en la puerta del centro médico.
El exmandatario acudió al hospital el miércoles para realizarse unos exámenes de rutina de su sistema digestivo, unas pruebas que se realiza de forma periódica desde que fue apuñalado en el abdomen en 2018 durante un acto electoral.
La hospitalización del también capitán retirado del Ejército coincide con el agravamiento de sus problemas con la Justicia brasileña, que le investiga por varios casos.
La Policía Federal lo citó a declarar el próximo 31 de agosto por dos casos, uno que se refiere a la supuesta apropiación indebida de joyas que recibió como regalos de Estado y el otro, una investigación de una supuesta trama golpista promovida por empresarios afines a grupos de extrema derecha.
Bolsonaro ya ha respondido a los cuestionamientos de la Policía en diversas ocasiones desde que dejó el poder el pasado 1 de enero, cuando le sucedió en el cargo Luiz Inácio Lula da Silva, quien lo derrotó en las elecciones de octubre pasado.
Entre ellos, destaca la investigación de la asonada golpista del pasado 8 de enero, cuando miles de sus simpatizantes invadieron de forma violenta las sedes de los tres poderes.
En otro frente judicial, el exgobernante fue inhabilitado por ocho años por el Tribunal Superior Electoral (TSE) el pasado 30 de junio por difundir bulos y atacar de forma grave el sistema electoral y las instituciones democráticas.