Dos jóvenes murieron hoy tras una masiva marcha de estudiantes en la ciudad chilena de Valparaíso, a 120 kilómetros al oeste de Santiago, en un confuso incidente que se produjo al término de una manifestación que había transcurrido, en términos generales, en forma pacífica.
Según la información entregada por la policía y algunos testigos, Exequiel Borbarán, de 18 años, y Diego Guzmán, de 25, murieron tras ser tiroteados por un hombre porque estaban dañando la fachada de su domicilio en Valparaíso.
Según las versiones de testigos, los jóvenes estaban pintando con espray la puerta de una casa al término de la manifestación en protesta por la forma en que el gobierno lleva adelante la prometida reforma educacional y su debate en el Congreso, cuando el dueño del inmueble se dio cuenta y empezó a discutir con ellos.
Luego, un joven que supuestamente es el hijo del dueño de la vivienda salió a la calle con un revólver y efectuó los disparos que causaron la muerte de los jóvenes.
Las víctimas eran alumnos de la Universidad Santo Tomás y Diego Guzmán, el mayor, era dirigente de las juventudes del Partido Comunista.
El presunto autor de los disparos fue detenido por la Policía, que aún no ha encontrado en el domicilio del sospechoso el arma que utilizó en el doble asesinato.
Los altos mandos de la Policía de Investigaciones (PDI) y Carabineros (Policía militarizada) no han difundido aún la identidad del sospechoso, pero confirmaron que tiene antecedentes policiales por varias detenciones y una causa por lesiones graves en 2010.
Esta es la primera vez que se produce la muerte de estudiantes en el marco de las movilizaciones que comenzaron en 2011 con masivas marchas en demanda de una reforma educativa.
De hecho, este jueves se llevaron a cabo multitudinarias manifestaciones de estudiantes universitarios y de enseñanza secundaria junto con profesores en las principales ciudades de Chile.
Si se exceptúa lo ocurrido en Valparaíso, las marchas transcurrieron sin incidentes de gravedad, salvo algunos altercados menores entre encapuchados y agentes antidisturbios.
El ministro del Interior, Jorge Burgos, condenó el doble homicidio y anunció la presentación de una querella criminal asÍ como la designación de un fiscal especial para investigar lo sucedido.
"El Gobierno no tolera ni tolerará acciones de esta naturaleza que pongan en riesgo la vida y a la vez garantiza el libre ejercicio de marchas que convoca la ciudadanÍa", advirtió el ministro.
Los convocantes de la jornada de paro y movilización aseguraron que unas 150 mil personas habían participado en la marcha celebrada en Santiago, mientras que la policía estimó la participación en 50 mil personas.
Por su parte, el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC), Ricardo Sande, emplazó al Ejecutivo a "pronunciarse" de manera concreta sobre los proyectos y tener en cuenta a los "miles de estudiantes movilizados que salen a las calles y exigen una respuesta".
Esta noche, cientos de personas participaronen varias ciudades de Chile en homenajes a los dos jóvenes asesinados.
El acto más multitudinario tuvo lugar en Santiago, donde varios centenares de personas se congregaron en la céntrica Plaza Italia con velas y lienzos para recordar a los jóvenes asesinados.
Los manifestantes cortaron el tránsito en el punto donde comienza la Alameda, la principal avenida de la capital.Las "velatones" se repitieron otros puntos del país como Valparaíso, Concepción, Temuco y Osorno.