El exrey de España, Juan Carlos I, implicado en diversos escándalos, presentó una declaración a la agencia de impuestos española para poner en orden su situación financiera, informó el domingo el periódico El País.
La declaración voluntaria fue presentada por su abogado y según las fuentes citadas por el periódico estaba relacionada con una investigación en curso sobre corrupción a través del uso de tarjetas de crédito.
La investigación legal fue confirmada el mes pasado por el fiscal general español.
Fuentes judiciales dijeron entonces a la AFP que estaban investigando si el exrey usó tarjetas vinculadas a cuentas no registradas a su nombre, lo que podría constituir un posible delito de lavado de dinero.
Según esas fuentes se investigan fondos depositados en varias cuentas españolas controladas por una empresa mexicana y un oficial de la Fuerza Aérea española para saber si el monarca accedió a ellas.
Los fiscales habían enviado solicitudes legales al exterior para determinar si el dinero depositado en las cuentas había sido ocultado a las autoridades fiscales.
Si se probaran, los hechos podrían constituir un delito de blanqueo de capitales por el que Juan Carlos podría ser procesado ya que el movimiento de fondos y el uso de las tarjetas de crédito ocurrió después de su abdicación, en junio de 2014.
Un portavoz de la agencia tributaria española no pudo confirmar ni desmentir la información de El País sobre la declaración voluntaria y dijo que por razones legales la agencia no podía comentar casos específicos. Tampoco hubo respuesta del bufete del abogado.