El número de muertos por el terremoto que azotó este viernes Marruecos se sitúa en 2,012 personas y los heridos ascienden a 2,059, según los datos recabados por el Ministerio del Interior marroquí.
En un comunicado, el Gobierno informó que del total de heridos, 1.404 se encuentran en estado grave.
Según estos últimos datos oficiales, se registraron víctimas en una decena de provincias: Al Haouz, -al sur de Marrakech y cercana al epicentro-, con 1,293 fallecidos, seguida de Taroudant (452 víctimas mortales), Chichaoua (191 fallecidos), Ouarzazate (41), Marrakech (15), Azilal (11), Agadir (5), Casablanca (3), Al Youssufia (1) y en Tinguir (1).
El boletín de alerta sísmica difundido por el Instituto Nacional de Geofísica marroquí explica que el terremoto, de magnitud 7, sacudió la región septentrional marroquí de Marrakech y se produjo a las 11:11 p.m. (hora local) a 8 kilómetros de profundidad.
Tuvo su epicentro en la localidad de Ighil, situada unos 80 kilómetros al suroeste de la ciudad de Marrakech.
Cruz Roja considera “críticas” próximas 48 horas para salvar vidas
La Federación Internacional de la Cruz Roja (FICR) destacó hoy que está ya asistiendo a equipos de la Media Luna Roja Marroquí en las operaciones de búsqueda y rescate, en las que, subrayó, las próximas 48 horas son críticas para salvar vidas.
“Los trabajos de búsqueda y rescate serán priorizados en las próximas 24 a 48 horas, decisivas en lo que a salvar vidas se refiere”, subrayó la directora global de Operaciones de FICR, Caroline Holt, en un comunicado de la Federación.
“Sabemos lo que puede llegar y es necesario trabajar para que haya un tratamiento digno de los cadáveres y para abastecer a la población con agua limpia”, subrayó Holt, en referencia al riesgo de que los problemas de higiene en las zonas afectadas puedan causar brotes epidémicos.
Los equipos de Cruz Roja también están ofreciendo primeros auxilios, apoyo psicológico y ayuda para transportar a los heridos a los hospitales.
“El trabajo en la región no va a durar dos o tres semanas: vamos a necesitar meses, quizá años, como ya ocurrió este año tras el seísmo de Siria y Turquía”, aseguró el director regional de FICR para Oriente Medio y el Magreb, Hossam Elsharkawi.