Chile vivió este viernes una nueva jornada de protestas en Santiago, con enfrentamientos entre policías y manifestantes que por momentos llegaron a expulsar a los uniformados y a festejar en la céntrica Plaza Italia, constató un periodista de la AFP.
A diferencia de viernes anteriores, la jornada de revuelta en la capital chilena pasó en minutos de disturbios, gases lacrimógenos y chorros de agua, a banderas, música y bailes cuando algunos manifestantes tomaron la rotonda, convertida desde el pasado 18 de octubre en epicentro de las protestas contra la desigualdad y el gobierno del conservador Sebastián Piñera.
Los manifestantes sacaron a los uniformados de la plaza a pedradas, pero más tarde la policía finalmente disolvió la movilización.
Hacía meses que los manifestantes no alcanzaban la zona central de la simbólica rotonda, custodiada fuertemente por policías y carros blindados desde que en marzo llegó la pandemia del coronavirus y se paralizó la revuelta social.
“Siempre va a ser la plaza del pueblo y queremos subir y vamos a subir porque tenemos que hacernos notar arriba, ahí es donde cuenta”, dijo a la AFP un manifestante que se identificó como Arturo Gutiérrez, de 27 años.