El minero chileno que escribió el famoso mensaje "Estamos bien en el refugio los 33", prueba de vida que culminó con el exitoso rescate de los 33 mineros de Atacama en 2010, se encuentra internado en una clínica psiquiátrica, según reportan sus excompañeros de encierro.
José Ojeda, de 53 años, quien escribió el mensaje que le anunció al mundo que él y sus compañeros estaban vivos tras el derrumbe que los sepultó a más de 600 metros de profundidad, permanece internado desde hace dos meses en un recinto médico en Santiago.
"Hablé con él la semana pasada y me dijo que se encuentra mejor. Él cae en depresiones, estuvo con muchas pastillas y las mezclaba con alcohol y eso empezó a arrojarle graves problemas", narró el minero Carlos Barrios al diario La Cuarta de Santiago.
"Está en un proceso del tratamiento relativamente bien. Tiene un problema psicológico relacionado con el tema del accidente (en la mina) y algunos problemas cotidianos como la falta de trabajo", afirma por su parte al mismo medio el minero Omar Reygadas.
Varios mensajes fueron enviados desde el fondo de la mina, pero el papelito escrito por José Ojeda fue el único advertido por los operarios que trabajaban en el rescate el 22 de agosto de 2010, cuando ya flaqueaban las esperanzas.
Los 33 mineros habían quedado atrapados 17 días antes, el 5 de agosto, y a través de sondas se buscaba desesperadamente hallarlos. No había mucho optimismo ni en los operarios ni en las familias, pero la aparición de ese papelito ese domingo lo cambió todo.
"No era el único mensaje. Eran muchos mensajes; los primeros los escribimos con lápiz pasta (bolígrafo)", contó a la AFP el propio Ojeda, un año después del rescate.
El papel emergió adosado a una sonda por el estrecho tubo que logró contactarlos al fondo de la mina San José. Primero fue encontrado por un operario, luego lo tomó el entonces ministro de Minería, Laurence Golborne, y finalmente el presidente Sebastián Piñera lo mostró al mundo.
"Esto salió hoy día de las entrañas de la tierra", dijo emocionado Piñera. "Es el mensaje de nuestros mineros que nos dicen que están vivos, que están unidos", añadió el mandatario mientras sus familiares se abrazaban de emoción.
"Realmente yo no lo veo como un mensaje, es un informe técnico. Con los años que llevo en la minería sabía perfectamente que si ocurría algo tenía que decir la cantidad de personas y el lugar en que estaba ubicado", añadió el minero, que donó el mensaje original al museo de Atacama.
Otros mineros también sufren las consecuencias del duro trabajo en minería.
Mario Gómez, el mayor del grupo, permanece internado en un clínica de Atacama a consecuencia de la silicosis.