El tradicional festival Mardi Gras de Nueva Orleans quedó empañado por una serie de tiroteos que dejaron tres muertos y cinco heridos.
Los primeros dos incidentes ocurrieron por la tarde del martes, cuando estallaron trifulcas en la ruta del tradicional desfile.
El subjefe policial Paul Noel dijo que un hombre recibió un tiro en la cabeza y que estaba en condición crítica, mientras que un menor de edad fue baleado en la pierna y estaba en condición estable.
En otro incidente, un hombre recibió dos balazos y murió camino al hospital, dijo el director policial Michael Harrison.
La tercera balacera ocurrió tarde por la noche, durante un festejo en una casa en el vecindario Lower 9th Ward, a unos 3 kilómetros (2 millas) de la ruta del desfile.
Según testigos, una ráfaga de metralleta estalló repentinamente.
Varias personas dispararon contra un automóvil que llevaba cinco personas, dijo la vocera policial Ambria Washington.
El vehículo quedó con las ventanas destrozadas, los neumáticos delanteros aplastados y más de una decena de balazos en la puerta del conductor.
El conductor del vehículo logró manejar hasta una estación de gasolina antes de que dos de los ocupantes fallecieran.
La policía llegó y acordonó la zona y detrás del perímetro, al igual que en las viviendas de las víctimas, lloraban amistades y familiares que aún vestían las coloridas vestimentas de los festejos.
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