Butacas de cine y asientos del metro y el tren. La última plaga de chinches de cama que sufre París se ha extendido más allá de los colchones donde se suele instalar. Desbordado por la situación, el Ayuntamiento capitalino ha pedido ayuda al Estado francés.
Estos minúsculos parásitos del tamaño de una pepita de manzana han generado una auténtica “psicosis” entre los habitantes de la principal ciudad francesa, tal y como refleja el diario Le Parisien en su portada de este viernes.
Voici à quoi ressemble une punaise de lit ⤵ Les bestioles, repérables à l’œil nu par leur taille, de 4 à 7 millimètres, par leur forme ovale et aplatie, et par leur couleur rouge brun. pic.twitter.com/iQpqXUkrdD
— Le Parisien (@le_Parisien) September 29, 2023
Aunque todavía no hay datos actualizados sobre el alcance de esta plaga, los relatos de vecinos, de las empresas de desinfección y de los usuarios de cines y de transportes públicos han puesto en alerta a las autoridades.
La ciudad de París, una de las más densas de Europa, está especialmente preocupada por el alcance de los chinches, a menos de un año de que reciba los Juegos Olímpicos y Paralímpicos en el verano de 2024.
”Los chinches de cama son un problema de salud pública y tienen que ser declarados como tal. Es necesario que el Estado reúna de manera urgente a los actores implicados para poner en marcha un plan de acción a la altura de ese azote”, dijo a EFE el vicealcalde de París, Emmanuel Grégoire.
Grégoire, lugarteniente de la regidora socialista Anne Hidalgo, envió una carta a la primera ministra francesa, Élisabeth Borne, para pedirle la organización de un “congreso nacional” sobre las plagas y exigió que la agencia regional de salud asuma “el costo financiero” de las desinfecciones, pero también “el psicológico”.
”Estamos preocupados porque es una especie invasiva. Si no abordamos el problema desde la raíz, podemos resultar desbordados”, advirtió el número dos de Hidalgo, quien propuso que en los seguros de las viviendas −obligatorios en Francia− se incluya también una cláusula sobre el riesgo de chinches.
