El presidente colombiano, Gustavo Petro, sostuvo un encuentro privado con el secretario general de la ONU, António Guterres, previo a la plenaria de 78ª Asamblea General de las Naciones Unidas, en el que hablaron de los procesos de paz en Colombia, medioambiente y crisis climática.
“El mandatario se reunió con el secretario general de la ONU, António Guterres, para hablar sobre la nueva estrategia global en materia de drogas, medioambiente y crisis climática, y política de Paz Total”, explicó la Presidencia en redes sociales sobre la reunión donde también estuvo presente el canciller colombiano, Álvaro Leyva.
La Oficina del Alto Comisionado para la Paz (OACP) aseguró sobre la reunión que “el apoyo internacional a la paz de Colombia se afianza en los escenarios más importantes a nivel mundial de la mano de nuestro presidente”.
El mandatario colombiano planteó a Guterres la necesidad de acabar con el prohibicionismo de la hoja de coca y el cannabis, y se refirió a la irrupción del fentanilo en el mercado de drogas.
En sus palabras, esta trae “la oportunidad para que una serie de materias que antes se consideraban ilícitas, como la cannabis −que se vende en almacenes en Nueva York, aquí al lado de la ONU, solo que no es ‘made in’ Colombia, en perjuicio de nuestro país−, y la hoja de la coca, que también se puede utilizar en otras materias, puedan salir definitivamente de ese prohibicionismo, facultado por una serie de resoluciones” de la ONU.
En referencia al fentanilo, “la realidad es que es altamente probable que estos procesos industriales se hagan en los mismos Estados Unidos, quizás en la frontera de México, aprovechando un menor valor de la fuerza de trabajo”, algo que supone una oportunidad para Colombia, ya que “la sacan del mercado de las drogas de una manera sustancial”, agregó.
Petro llegó el sábado a Nueva York para participar por segunda vez desde que es presidente en la Asamblea de la ONU, después de que el año pasado su discurso sobre los muertos que ha provocado la guerra contra las drogas en Colombia y la necesidad de un cambio de enfoque fuera aplaudido por muchos sectores.