Tres de los 24 policías lesionados por una explosión en el centro de Bogotá continúan en cuidados intensivos debido a gravedad de sus heridas, se informó el lunes.
El director clínico del hospital de la policía, coronel Albeiro Ruiz Reyes, señaló en rueda de prensa que uno de ellos está pendiente de una neurocirugía "debido a que las esquirlas recibidas del artefacto explosivo penetraron al cerebro. No es de mucha gravedad pero sí de cuidado. A los dos otros policías que están en cuidados intensivos los estamos valorando con una ecografía-ocular porque les ha afectado sus ojos".
Agregó que ya fueron dados de alta tres agentes y otros cuatro que habían sido atendidos en el hospital militar. El resto se recupera de las heridas.
El domingo un explosivo de mediano poder estalló en la mañana en el céntrico barrio La Macarena.
La onda explosiva afectó a un grupo de policías que custodiaba la zona.
Por su parte, el comandante de la policía de Bogotá, general Hoover Penilla, informó que se inició una investigación para dar con los autores del atentado, que habrían detonado aproximadamente dos kilos de explosivos.
Además de provocar heridas a 24 policías y dos civiles, la explosión causó daños en las fachadas de varias residencias y establecimientos públicos cercanos.
"Estábamos todos desayunando cuando se escuchó la bomba", narró en entrevista con The Associated Press Juan Gonzalez propietario de El Pitt, un hostal cercano al sitio de la explosión.