El príncipe Guillermo, duque de Cambridge, visitó hoy la Casa Blanca y fue recibido por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en el Despacho Oval, mientras su esposa, la duquesa Catalina, permaneció en Nueva York.
La pareja, que espera a su segundo hijo para el próximo abril, llegó el domingo a Nueva York para una visita de tres días y hoy por la mañana el duque tomó un avión comercial para trasladarse a Washington, de acuerdo con un portavoz del Palacio de Buckingham.
Sobre las 10:00 a.m. hora local (15.00 GMT), el duque llegó a la Casa Blanca, realizó un tour por la residencia presidencial y fue recibido por el vicepresidente estadounidense, Joe Biden, y su esposa, Jill.
Después, el nieto de la reina Isabel II de Inglaterra mantuvo una breve reunión con Obama en el Despacho Oval.
Vestidos de traje oscuro y sonrientes, ambos hablaron de forma distendida ante las cámaras, pero no hicieron declaraciones a los periodistas.
Antes de regresar a Nueva York hoy mismo, el príncipe pronunciará una conferencia sobre el combate al tráfico ilegal de animales salvajes en la sede del Banco Mundial (BM) en Washington.
Mientras, en Nueva York, la duquesa de Cambridge visitará hoy un centro de infancia en Harlem junto a la esposa del alcalde, Chirlane McCray, y almorzará con empresarios y artistas británicos que residen en la ciudad.
Por la tarde, Guillermo y Catalina asistirán a una recepción organizada por la Royal Foundation y la Fundación Clinton, que estará representada por la exsecretaria de Estado Hillary Clinton y su hija, Chelsea.
La pareja terminará el dÍa presenciando el partido de la NBA entre los Brooklyn Nets y los Cleveland Cavaliers.
El martes, ambos visitarán el monumento conmemorativo y el museo dedicados a los atentados del 11S y acudirán a una cena en el museo Metropolitan, mientras que el príncipe estará también en un acto en el Empire State Building junto al alcalde de Nueva York, Bill de Blasio.
Este viaje fuera del Reino Unido es el primero para Catalina desde que se anunció que está embarazada del segundo hijo de la pareja, que será el cuarto en la línea de sucesión al trono después de su hermano, el príncipe Jorge.