Un sismo de magnitud 7.5 se registró este martes 23 de junio en el sur de México, informó el Servicio Sismológico Nacional, sin que hasta el momento las autoridades reporten daños graves.
El epicentro se ubicó en la localidad de Crucecita, en el sureño estado de Oaxaca, y el movimiento fue perceptible en varias partes de Ciudad de México, donde cientos de personas salieron a la calle.
“No tenemos al momento ningún daño reportado de manera preliminar. Algunas instituciones continúan haciendo evaluación de su infraestructura prioritaria”, dijo el coordinador nacional de Protección Civil, David León, en entrevista con la cadena Milenio.
El gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, señaló poco antes en Twitter que se activaron protocolos de seguridad "para monitorear las calles y mantener protegida a la población".
Por su parte, la alcaldesa de la capital mexicana, Claudia Sheinbaum, dijo que su gobierno activó protocolos de revisión y que hasta el momento no se reportan afectaciones.
"Ya estamos recibiendo reportes de protocolo. Hasta el momento ningún incidente mayor. Seguimos informando", afirmó Sheinbaum en Twitter.
El fuerte temblor fue perceptible en varias partes de Ciudad de México, donde viven 8.8 millones de personas, y que fue afectada en 2017 por un sismo de 7.1 que dejó en todo el país 360 muertos.
En la capital, la alerta sísmica sonó antes de que el temblor fuera perceptible, por lo que varias personas evacuaron sus edificios, muchos de ellos utilizando cubrebocas por la pandemia del nuevo coronavirus.
"Cuántos problemas con el virus, y ahora los temblores y se me acaba de morir un hijo y otro está enfermo, entonces imagínese", dijo a la AFP entre lágrimas María Teresa Durán, de 80 años, en el céntrico barrio Del Valle.
El fenómeno sorprendió también a varios capitalinos que por la pandemia están acostumbrados ya a trabajar en casa.
“Estábamos trabajando en pijama, terminando de desayunar y pues tuvimos que salir así”, dijo por su parte Sonia Flores Cano, de 29 años.