La sonda china Chang’e 5 despegó este jueves de la superficie lunar rumbo a la Tierra, en el primer intento de traer muestras del suelo del satélite en más de 40 años.
El módulo, que se posó sobre la Luna el martes, decoló a las 15H10 GMT, de acuerdo a imágenes difundidas por la televisión estatal CCTV.
En una inmensa sala de control, los ingenieros encargados de la misión aplaudieron largo rato, con la mirada fija en las pantallas gigantes.
Chang’e 5 se compone de varias partes: un orbitador, un alunizador y un módulo para remontar desde el suelo hasta la órbita lunar).
Este último partió de la Luna propulsado por un motor de poco más de 300 kilos de empuje, en un vuelo que duró seis minutos, indicó la agencia espacial china.
Las rocas, colocadas en el módulo de ascenso, después debían ser transferidas a una “cápsula de reingreso”.
Si no se produce ningún percance al retorno, China se convertirá en el tercer país que logra traer a la Tierra muestras de suelo y rocas lunares, después de Estados Unidos y la Unión Soviética.
La URSS fue la última en lograrlo con éxito, con la misión robótica Luna 24 en 1976.
La televisión pública china CCTV describió el miércoles a Chang’e 5 como una de las operaciones “más complicadas y delicadas” del programa espacial nacional.
La misión incluyó extraer 2 kilos de rocas tras perforar el suelo hasta dos metros de profundidad, en el “Océano de las Tormentas”.
Una vez analizadas por los científicos contribuirán a explicar la historia lunar.


