Tegucigalpa, la capital de Honduras, ha sido declarada en alerta máxima por los daños a causa de las lluvias que dejó la tormenta tropical Sara, que este domingo salió del territorio hondureño dejando alrededor de 111,000 personas afectadas a nivel nacional, según informes oficiales.
A raíz de la crecida de los ríos que cruzan por la capital hondureña, principalmente el Choluteca, que subió cuatro metros su caudal, varios puentes importantes que la comunican con la ciudad gemela de Comayagüela, fueron cerrados por la Alcaldía Municipal.
Centenares de personas han sido evacuadas en los últimos dos días a raíz de las lluvias que desde el jueves azotan a todo el suelo del país centroamericano, con mayores precipitaciones en toda la región caribeña, que es la más productiva en materia agrícola, industrial y comercial.
En Tegucigalpa, también cruzada por fallas geológicas, algunas familias fueron obligadas por socorristas a abandonar sus modestas viviendas, en barrios situados a orillas de ríos y quebradas que fueron inundados.
La crecida del río Choluteca, al que le tributan otros afluentes en la región central y que desemboca en el Golfo de Fonseca (Pacífico), también está teniendo repercusiones en el sur de Honduras inundando partes bajas, informó la Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco).
El sur de Honduras, que lo integran los departamentos de Choluteca, limítrofe con Nicaragua, y Valle, con El Salvador, fueron declarados en alerta roja (evacuación obligada) por la subida del caudal de ríos que la cruzan como el Choluteca, Goascorán y Nacaóme.
Aunque la tormenta Sara, que además obligó al cierre de cuatro aeropuertos internacionales, ya salió del país, las alertas roja, amarilla y verde se mantienen en los 18 departamentos que conforman el territorio hondureño.
Otros seis departamentos siguen en alerta roja en el Caribe, a los que se suman cuatro en amarilla y seis en verde.