La expresidenta interina de Bolivia Jeanine Áñez, encarcelada por un supuesto golpe de Estado en 2019 contra el exmandatario Evo Morales, fue trasladada este sábado de madrugada a otra prisión de mujeres en La Paz, según indicó la detenida y confirmaron las autoridades.
“Me sacaron diciéndome que iba a la clínica del Sur”, declaró escuetamente la exmandataria a la prensa al momento de llegar al penal de mujeres de Miraflores, lugar donde seguirá cumpliendo los cuatro meses de prisión preventiva decretados en su contra mientras dura la investigación de la Fiscalía.
Añez fue trasladada en una ambulancia a ese recinto penitenciario, después de dos jornadas alegando problemas de salud.
La Dirección General de Régimen Penitenciario informó en un comunicado que el cambio al Centro Penitenciario Femenino de Miraflores se realizó porque ese recinto “cuenta con instalación médica, equipos y personal médico acorde al tratamiento específico y recomendado que requiere la privada de libertad”.
El viernes por la tarde, tres jueces de La Paz dispusieron “la salida judicial” de Añez a una clínica para su valoración médica por especialistas de cardiología. Sin embargo, poco después, otro juez revocó esa autorización disponiendo que fuera atendida por el personal médico del Instituto de Investigación Forense.
La hija de Añez, Carolina Ribera, había solicitado el traslado de su madre a un centro médico para tratarle una “hipertensión arterial sistémica”. Según ella, las autoridades del penal incumplieron la decisión judicial negando “toda asistencia de salud” a su madre.
En un vídeo publicado en la red social Twitter, Ribera señaló que la negativa a trasladar a Áñez a un centro médico en lugar de al nuevo presidio supone un “atentado contra la vida” de la expresidenta interina.
“Esto es un abuso, una injusticia y están atentando contra la vida de mi madre, que necesita con urgencia atención médica”, destacó la hija de Áñez.