El primer ministro británico, Keir Starmer, dijo este domingo que “un número de países” han mostrado su disposición a unirse a la “coalición de voluntarios” que el Reino Unido está impulsando para preservar la paz en Ucrania si se llega a un acuerdo para un alto el fuego.
En una rueda de prensa tras albergar una cumbre informal en Londres, Starmer no quiso concretar cuáles son los países que se sumarían a ese plan, pero aseguró que el Reino Unido está dispuesto a poner “botas sobre el terreno y aviones en el aire” como garantías de seguridad para Ucrania.
El primer ministro británico, Keir Starmer, también anunció este domingo una ayuda financiera a Ucrania para que pueda comprar más de 5,000 misiles de defensa aérea.
Starmer detalló que estos misiles, que se fabricarán en Belfast, en Irlanda del Norte, fortalecerán a Ucrania y garantizarán la paz cuando ésta llegue.
Este armamento “será vital para proteger la infraestructura crítica ahora y fortalecer a Ucrania para garantizar la paz cuando llegue, porque tenemos que aprender de los errores del pasado”, agregó Starmer, que recalcó la importancia de que todos los países asuman sus responsabilidades.
Destacó la importancia de mantener el flujo de ayuda militar a Ucrania mientras dure la guerra y seguir con la presión económica sobre Rusia.
Según Starmer, cualquier paz duradera debe garantizar la soberanía y la seguridad de Ucrania, mientras que se exigirá que este país esté presente en cualquier negociación de paz para acabar el conflicto armado, que empezó en febrero de 2022.
En caso de un acuerdo de paz, los líderes europeos intentarán disuadir cualquier invasión futura de Rusia a Ucrania.
“Para apoyar la paz en nuestro continente y tener éxito, este esfuerzo debe contar con un fuerte respaldo de Estados Unidos”, dijo.
“Estamos trabajando con Estados Unidos en este punto después de mi reunión con el presidente (Donald) Trump la semana pasada y permitidme ser claro, estamos de acuerdo con el presidente en la necesidad urgente de una paz duradera, ahora debemos lograrla juntos”, subrayó.
“Finalmente, acordamos que los líderes se reunirán nuevamente muy pronto, para mantener el ritmo de estas acciones y seguir trabajando hacia este plan compartido”, explicó.
“Estamos en una encrucijada en la historia. Este no es un momento para más palabras. Es hora de actuar. Es hora de dar un paso adelante y liderar y unirnos en torno a un nuevo plan para una paz justa y duradera”, resaltó el primer ministro.