¿Quién decreta como tal, una tiranía y bajo qué parámetros? Este es un tema delicado y siempre imbuido en la propaganda ideológica.
Viendo solo por encima algunos aspectos que se enarbolan para sentenciar, casi desde el inicio, al Gobierno venezolano liderado por Hugo Chávez, como dictadura, repasaré solo algunos de esos argumentos con la intención de crear inquietudes y debate que genere mayor comprensión del fenómeno.
Uno de los primeros argumentos ha sido señalar que Venezuela vive en un sistema comunista, pero de ser así, allá no existiría la empresa privada ni una oligarquía capitalista (que hoy financia el desabastecimiento), esto indica un desconocimiento de lo que es una economía comunista y si sumamos la histórica propaganda en contra de ella, tendremos como resultado un gran número de personas repitiendo el estribillo del comunismo.
Otro argumento generalizado y con gran peso en la psique de los latinoamericanos es el tema de la corrupción, pero ¿es que acaso no hay corrupción en otros países?, pues claro que sí, por eso nos identificamos de una vez y nos caen tan mal los corruptos.
Pero si este es el motivo, entonces la mayoría de los países tendríamos que estar en una situación parecida a la del hermano país, sin embargo, no pasa nada ¿a qué se deberá? Aquí mismo en Panamá deberíamos estar revueltos con tantos escándalos de corrupción.
México se burló de los maestros y sus muertos en Oaxaca, no da respuesta con los desaparecidos en Ayotzinapa, el narcotráfico hace estragos, pero a ellos nadie les pone sanciones como a Venezuela ¿por qué ocurre esto?
La libertad de expresión es fundamental en una democracia y se dice permanentemente que Venezuela no la tiene, pero si la oposición dice que no hay libertad de expresión aparecen un montón de medios que le dan cobertura mundial a esta noticia, lo cual pareciera una chistosa contradicción.
Es un país sin democracia, pero con oposición que hace campañas y que ha participado en alrededor de 12 procesos de votación entre referendos y elecciones.
Hay como una doble moral en todo esto, no solo en la actualidad, también en nuestra historia. Pinochet, Videla, Somoza, Strossner, por solo mencionar un par, no permitían nada de esto y nada se dijo en esos momentos, sería porque ellos sí daban terror con su plan cóndor que te buscaba donde estuvieras para ser torturado y desaparecido sin que nadie viera nada, pero ahora todos señalan al Gobierno venezolano como dictadura.
Tal vez por falta de conocimiento en historia y economía, por noticias tendenciosas, la propaganda ideológica y las redes sociales, muchas veces ahogadas en fake news, es que no se contribuye a un debate de mayor altura que permita ilustrarse de la experiencia y nos haga más justos a la hora de dar nuestra valoración y sobre todo nos ponga alerta en cuanto a nuestro devenir histórico.
El autor es cartógrafo y estadístico