El conocimiento científico es una respuesta dada a un determinado problema que nos afecta a todos. Sin embargo, estas respuestas basadas en la ciencia no se obtienen fácilmente. Las propuestas de planes de gobierno basados en la ciencia, nos brindarían mayores posibilidades de éxito y efectividad en la reducción de los principales problemas del país.
Al momento de leer la propuesta o recibir al político en su hogar, realice las siguientes interrogantes. ¿Cuáles son los principales problemas que identifica la propuesta? ¿Por qué considera estos los problemas más importantes? ¿Cómo pretende dar respuesta a los diversos problemas identificados? ¿Cómo se podrán resolver? No basta con que nos muestren una lista de posibles políticas públicas de lo que se propone hacer en el nuevo gobierno. Por ejemplo, decir que “resolveremos el problema del transporte, para que todos los panameños puedan dormir más”, no basta: es necesario indicar cómo se hará eso.
Lo más bonito de la ciencia es que no está condicionada a ser ejercida por alguien con muchos títulos. Todos tenemos un pequeño científico dentro. Por ejemplo, la esencia del enfoque explicativo de la ciencia es algo que todos los panameños decimos: “una causa, un efecto”.
Conocemos el efecto: “corrupción, transporte, educación, violencia”. Entonces, preguntemos a los candidatos lo siguiente. ¿Cuál es la causa de estos problemas? ¿Cuál es la evidencia que sustenta la explicación dada? Y si le convence, siga preguntando. ¿Qué vas a hacer para eliminar las causas de estos problemas? Lo importante es recordar que una postura científica implica preguntar lo mínimo: qué, por qué, cómo. Y atenerse a lo que resulte, a la hora de decidir.
El autor es doctor en sociología, miembro de Ciencia en Panamá.