Regístrate para recibir los titulares de La Prensa en tu correo


El derecho a la educación y las escuelas rurales

La situación de las escuelas rurales en Panamá representa una deuda histórica que persiste desde hace muchas décadas, evidenciando un retraso significativo en comparación con otros sectores educativos del país. Las denominadas “escuelas rancho” se caracterizan por tener suelos de tierra, paredes de planchas de zinc o madera, e incluso algunas carecen de paredes. Además, enfrentan problemas críticos como la falta de suministro de agua potable, energía eléctrica, alcantarillado e implementos básicos para el desarrollo educativo. A pesar de los avances puntuales logrados a lo largo de los años, la realidad muestra que incluso algunas escuelas en áreas urbanas carecen de instalaciones adecuadas, lo cual agrava aún más la situación en las zonas rurales de difícil acceso. Es urgente adoptar medidas concretas y sostenibles para mejorar estas instituciones y garantizar un ambiente adecuado para el aprendizaje.

El problema no es nuevo. A pesar de que a todos los panameños se les descuenta el seguro educativo, el país sigue rezagado en calidad educativa en comparación con sus vecinos. No es necesario un informe PISA para demostrar esta realidad. Es evidente la necesidad de implementar nuevas estrategias y políticas públicas diseñadas exclusivamente para abordar este problema, que por décadas el Ministerio de Educación no ha podido resolver. Lo cierto es que ese “Dubái de las Américas” del que se habla está muy lejos de materializarse, especialmente cuando nuestra niñez carece de los mismos recursos, atención y calidad educativa que los demás niños de la región.

Debemos tomar como ejemplo programas como “Enlaces” en Chile, que introduce tecnología en escuelas rurales; “Proheco” en Honduras, que gestiona las escuelas con el apoyo de la comunidad; “Programa Novo Mais Educação” en Brasil, que mejora la educación en áreas rurales de bajo nivel socioeconómico, incluyendo matemáticas y actividades extracurriculares; y “Escuela Nueva” en Colombia, que ha sido exitosa en zonas rurales. No se trata solo de nuevas construcciones, sino de establecer programas educativos especializados para estas áreas.

A pesar de contar con proyectos como la ampliación del Canal, las líneas de metro y el desarrollo de un tren, no se ha logrado eliminar las “escuelas rancho”. Este problema ha persistido a lo largo de diversos gobiernos. En la página web del Ministerio de Educación debería publicarse un listado oficial de todas las escuelas en mal estado, tanto en áreas metropolitanas como rurales. Este registro debería incluir ubicación, imágenes, videos, el estado actual de los trámites administrativos, la constructora encargada (si existe), fechas de reparación y entrega, y los montos asignados para cada obra. Los ciudadanos tienen derecho a acceder a esta información, ya que se financia con sus impuestos. Las escuelas no deben construirse con carpas o módulos, salvo en períodos transitorios mientras se completan las estructuras principales.

Garantizar una educación de calidad en Panamá, especialmente en las escuelas rurales, es un reto que requiere atención especializada. En primer lugar, es fundamental mejorar las infraestructuras existentes mediante la construcción o remodelación de escuelas con materiales duraderos y adaptados al clima local. Asimismo, se debe asegurar que cada escuela cuente con servicios esenciales como agua potable, electricidad y acceso a internet. También es importante establecer bibliotecas móviles o comunitarias para llevar recursos educativos a las comunidades más remotas.

Los docentes que trabajan en áreas de difícil acceso deben recibir una remuneración significativamente superior a la media, así como bonos salariales, facilidades crediticias y opciones de vivienda adecuada. Además, es crucial que estén capacitados en primeros auxilios y dispongan de medicamentos y sueros para tratar picaduras y mordeduras de animales. Esto incentivaría a los maestros a desplazarse hacia estas zonas remotas. También es esencial garantizar la presencia de centros médicos cercanos a las escuelas para atender emergencias.

Por otro lado, se debe garantizar el suministro de energía eléctrica mediante fuentes alternativas como plantas de reserva, baterías o paneles solares. El docente en un ambiente rural debe contar con oportunidades de crecimiento profesional continuo que lo motiven, con énfasis en metodologías adaptadas al contexto rural.

Es imprescindible que las autoridades del orden público realicen visitas periódicas a las comunidades para fiscalizar la zona y garantizar la seguridad del personal docente y la comunidad. Estas visitas deben registrarse y realizarse regularmente, con la participación de personal médico y trabajadores sociales, abordando problemáticas de pobreza y otras situaciones que afectan la educación.

En muchos países, las escuelas rurales funcionan como verdaderos centros comunitarios, ofreciendo educación y actuando como puntos de comunicación mediante internet. Estas instalaciones también pueden servir para brindar atención sanitaria durante giras médicas y como alojamiento temporal para miembros de la fuerza pública, maestros y otros profesionales. Por tanto, es esencial que las escuelas cuenten con dormitorios para los docentes que necesiten permanecer en el área.

Dado que varios organismos y ministerios utilizan estas instalaciones, su mantenimiento no debe recaer exclusivamente en el Ministerio de Educación, sino que debe contar con recursos adicionales.

Es vital asegurar la disponibilidad de señal celular en las escuelas. Las compañías de telecomunicaciones podrían beneficiarse de incentivos fiscales al instalar antenas en regiones remotas, mejorando la cobertura. En casos donde no sea posible instalar antenas, se debe garantizar la prestación de servicios de comunicación por satélite, tanto para telefonía como para internet.

Finalmente, se podría implementar un programa empresarial en el cual compañías adopten escuelas en áreas de difícil acceso, asumiendo su mejoramiento y construcción. Los gastos serían deducibles de impuestos, con mayores incentivos para las escuelas más remotas. Estas mejoras serían supervisadas por el Ministerio de Educación y reportadas a las autoridades competentes.

Es importante involucrar a la comunidad en el cuidado y mantenimiento de las escuelas. Los padres y líderes comunitarios deben participar activamente en la planificación y gestión de iniciativas, promoviendo proyectos como jardines escolares que proporcionen alimentos a la comunidad.

El autor es abogado, investigador y doctor en estudios avanzados en derechos humanos.


La Prensa forma parte de

The Trust Project


COMENTARIOS


Última Hora

  • 05:05 Visita de Hegseth, auditoría a puertos, mina de cobre y Martinelli: lo que dijo Mulino Leer más
  • 05:04 Tal Cual Leer más
  • 05:04 El toque virtual en la educación médica: clases y profesores a distancia en universidad particular Leer más
  • 05:02 Lula pide ‘que se haga justicia’ con el proceso a Bolsonaro Leer más
  • 05:02 Lidera tu hoja de ruta de planificación patrimonial Leer más
  • 05:02 Secretaria de Seguridad de Estados Unidos se reúne con Bukele y agradece ‘aceptación’ de deportados Leer más
  • 05:01 Cinco panameños inician la temporada 2025 en las Grandes Ligas  Leer más
  • 05:01 Cuáles serán las pretensiones: ¿retomar el Canal o invadir a Panamá? Leer más
  • 05:01 Nicaragua protesta ‘ante el usurpador Gobierno de Costa Rica’ por ‘insólita comunicación’ Leer más
  • 05:01 Sin pruebas concluyentes: Tribunal absuelve a exministros por el alquiler de helicópteros del PAN Leer más

LAS MÁS LEÍDAS

  • Mano de Coto Córdoba acaba en espaldarazo de Christiansen y confusión de identidad en redes sociales. Leer más
  • El Ifarhu pagará becas y asistencias económicas este lunes 31 de marzo; estos son los lugares. Leer más
  • CK Hutchison cerrará venta de sus puertos en Panamá pese a críticas de Pekín; el pacto se firmaría la próxima semana. Leer más
  • ‘En la Facultad de Medicina de la UP no hay cupos asegurados’, afirman dos graduandos de la carrera. Leer más
  • Aparece con vida Dayra Caicedo, quien fue privada de libertad en Arraiján hace más de un mes. Leer más
  • Desmantelan una red de minería ilegal que operaba en la Cuenca del Canal de Panamá. Leer más
  • Residentes de San Francisco exigen detener elección de la Junta de Planificación Municipal. Leer más

Recomendados para ti


DESTACADOS

  • 05:04 Tal Cual Leer más
  • 05:02 Lidera tu hoja de ruta de planificación patrimonial Leer más
  • 05:01 Cuáles serán las pretensiones: ¿retomar el Canal o invadir a Panamá? Leer más
  • 05:01 Al bagazo, poco caso… Leer más
  • 05:01 ¡Gracias a mí! Leer más