Hoy por hoy: la soberanía panameña no se negocia



Las recientes declaraciones del presidente electo Donald Trump sobre retomar el control del Canal de Panamá son una afrenta a la soberanía nacional, lograda con sacrificio y valentía. Los Tratados Torrijos-Carter y el Protocolo de Neutralidad consagran que, desde 1999, esta vía interoceánica pertenece plenamente a Panamá. Su administración es nuestra responsabilidad, no un tema de debate político. A los panameños nos corresponde mantener el canal al servicio del país y del comercio mundial, asegurando su funcionamiento con transparencia y eficiencia. Esto implica garantizar los recursos hídricos necesarios, preservar su infraestructura y realizar el mantenimiento adecuado. La gesta del 9 de enero de 1964 nos recuerda que la defensa de nuestra independencia demanda compromiso. Hoy, ese compromiso también exige administrar el canal con visión y responsabilidad, demostrando al mundo que Panamá puede preservar esta obra monumental como pilar de desarrollo y ejemplo de soberanía bien ejercida.

LAS MÁS LEÍDAS