El 23 de febrero de cada año, Japón se viste de fiesta para celebrar el cumpleaños de su Majestad Imperial Naruhito, de la dinastía del Crisantemo, que representa el último de un linaje de poder de más de 14 siglos. Su mandato se identifica como la era de “la hermosa armonía” o Reiwa.
Al asumir su reinado, conforme a su mandato constitucional de representar el símbolo del Estado y la unidad de la nación, se compromete a trabajar por la paz y la felicidad de su pueblo, emulando la política de su padre, el Emperador Akihito. Su visión política se ha mantenido constante y, a nivel internacional, busca el desarrollo de las naciones y la paz mundial, enfocándose en apoyar proyectos que tengan impacto social tanto en su país como a nivel global. Esto refleja su sólida formación, con honores en el área de las humanidades en una universidad de Gran Bretaña.
En su mensaje por su 65.º cumpleaños, recordó que, además, en este año 2025, se conmemoran 80 años del final de la Segunda Guerra Mundial. Destacó la importancia de recordar los trágicos hechos vividos por aquellos que padecieron el conflicto y las pérdidas de vidas, algo que no debemos olvidar. También recordó los relatos de sus padres sobre las trágicas experiencias bélicas y su profundo anhelo por la paz.
Con sentidas palabras, en un diálogo con periodistas en el Palacio Imperial de Tokio, habló sobre las penurias sufridas por quienes fueron los constructores de su nación y renovó su compromiso de seguir trabajando arduamente como símbolo del Estado y de la unidad del pueblo, por la paz. Anheló que la ciudadanía reflexione y reconozca el valor de la paz.
El cumpleaños de Naruhito, Su Majestad Imperial de Japón, nos permite recordar que Japón es un país con el que mantenemos lazos de amistad de más de 120 años y relaciones diplomáticas con su noble pueblo, que datan de los primeros años de nuestra independencia en 1904, pero que tienen antecedentes siglos antes, durante el Shogunato Tokugawa, alrededor de 1860, como hemos comentado en otros momentos.
Esta relación diplomática impacta a la población a través de la ejecución de diversos proyectos y acciones, particularmente en los procesos de formación técnica de JICA, programas sociales, comunitarios, cultura, educación, artes marciales, preservación del ambiente, relaciones económicas, comerciales y en el uso de la vía interoceánica.
Nos regocijamos con el pueblo de Japón por el cumpleaños de Su Majestad Imperial. ¡Felicidades!
Queremos resaltar, en cuanto a la cooperación técnica en la educación superior con universidades en Panamá, particularmente con la Universidad Católica Santa María La Antigua (USMA), los programas de intercambio, transferencia de conocimientos y oportunidades de pasantías a estudiantes y docentes en distintas áreas del conocimiento, ejecutados con el Estado de Japón a través de su embajador, Kazuyoshi Matsunaga. Estos programas permiten conocer la diversa y enriquecedora historia y cultura milenaria de Japón.
El autor es profesor de la USMA.