No cabe duda, la historia nos convence que los presidentes recién inaugurados cuentan con las ventajas y recursos para imponer cambios constitucionales convenientes a la nación. Sin embargo, algunas veces se dejan encantar o seducir por los intereses evidentes de grupos, por lo general estos de las clases privilegiadas política y económicas. También se registran ejemplos que demuestran a presidentes en la mitad del tiempo de su gestión, ya desgastados y bajo asedio, lamentarse de no haber realizado los cambios convenientes sin marginación ni discriminación social, cuando las brisas de las circunstancias imperantes corrían a su favor, caso expresidente Juan Carlos Varela.
Sigo optimista y pienso que el presidente Laurentino Cortizo aún tiene el espacio, capacidad, liderazgo y pericia para sorprendernos con una maniobra de acrobacia política, por virtud de la sensatez y liderazgo excepcional, hasta convocar la constituyente paralela como lo indica el artículo constitucional 314. No debo evitar expresar que la Concertación para el Desarrollo Nacional, aunque es una herramienta valiosa para robustecer la democracia, consulta y diálogo nacional, ha sido utilizada como espada política del partido en el poder, en detrimento de los intereses nacionales de todos, sobre todo en las dos últimas administraciones. Si el presidente convoca a la constituyente paralela, sin ninguna duda crecerá su imagen de estadista y unirá fuerzas. De lo contrario, preveo confrontaciones políticas y desencantos tempranos. El presidente debería considerar, una posible confrontación con el Órgano Legislativo, frente al tema de las reformas o de una nueva Constitución, ojalá que no, en tal caso debe convocar al soberano y gobernar con su apoyo sobre sus espaldas y así tener un consenso nacional.
La idea ya en ejecución de culturizar a las juventudes a través de la buena música, arte y red de coros u orfeones es estupenda, brillante.
Por otra parte, sostener a Odebretch en Panamá concursando como si nada hubiera ocurrido en temas de corrupción escandalosos en nuestro país y América, necesita ser enfrentado. Suicidios dolorosos, empresarios confesos, expresidentes en fuga y en nuestro medio ciudadanos políticos de muy alto perfil, señalados, entre ellos expresidentes. Que siga concursando esta empresa siniestra despertaría sospechas que aún pueden evitarse.
Si se impone la terquedad, hay que ser consciente de que es el propio gobierno se está pegando un tiro en su propio pie. El acuerdo por $200 millones que está pagando Odebretch a Panamá, a base de más adjudicaciones de contratos, no es más que una burla que nos dejó sembrada el ex presidente Varela, comprometido con esta constructora.
La situación de Venezuela exige de Panamá pronunciamientos y actitudes más viriles y enérgicas en defensa de los derechos humanos del hermano pueblo de Venezuela. Confrontar al estilo de Omar Torrijos al déspota de Maduro, como actuó en los tiempos del dictador Anatasio Somoza de Nicaragua, y mostrar mayor determinación para coadyuvar a expulsarlo del poder, inclusive de la OEA, donde somos objeto de críticas por nuestro mutismo escurridizo, contrario a nuestra tradición del Grupo de Contadora. Deberíamos unirnos a los claros ejemplos de dignidad de los pueblos de Brasil, Colombia, Argentina y Chile… se me ocurre incluso retirar al embajador de Panamá en ese país.
Las empresas productoras de etanol a base de caña de azúcar amenazan con destruir la producción de arroz, granos básicos y ganadería. Además, al pretender la obligatoriedad a todo dueño de vehículo de utilizar el etanol, mediante una ley, sin importar a los dueños del negocio, los daños que este alcohol causa a los motores, como lo habían logrado durante la administración Martinelli, es un abuso y violación del libre comercio y es un perjuicio a la propiedad privada y a los derechos humanos. Por otra parte, en 10 años más, ya están los carros eléctricos en Panamá
El Gabinete de Asuntos Agropecuarios desde mi óptica fomenta la burocracia, teorización estéril , y es un desperdicio de horas hombre y de talento, valor tiempo. La estrategia para el desarrollo agropecuario del país requiere volcarse al campo y no a salas refrigeradas . Todo sugiere que es impostergable la reingeniería del “cerebro motor con sus pistones del MIDA”. Por ejemplo, la Dirección de Planificación Agrícola debería elevarse a Secretaría Nacional sustituyendo a la Secretaría Técnica, en el conocimiento, planificación y dirección nacional de extensión y transferencia del conocimiento y tecnología, cosecha de aguas, nuevas semillas regionalizadas, que en adelante deberían ser el transbordador del desarrollo agropecuario nacional.
El ejército de productores de arroz y otros granos, así como lácteos, solo espera por la decisión política del Estado para producir la demanda nacional de alimentos. Además, hay que considerar que los excedentes deben convertirnos en un país exportador de arroz en el mercado internacional, sin colisionar con las normas establecidas en la OMC.
Finalmente, si en los próximos 10 años no logramos elevar la producción de alimentos hasta sustituir las importaciones, el Ministerio de Desarrollo Agropecuario debería cerrarse, toda vez que la razón de su ley, creación y funcionamiento es garantizar la producción interna de los alimentos que requiere el pueblo panameño.
Todos debemos discutir y decidir en un plebiscito cuál es la prioridad inteligente, el cuarto juego de esclusas o el tren a Chiriquí.
Señor presidente, la Policía Nacional hoy no está debidamente organizada ni preparada profesionalmente para afrontar los efectos de la presencia de la China y la apertura de Darién, por lo que se debe ser sumamente cuidadoso con estas iniciativas.
El autor es general (r) y ex ministro de Estado