A pesar de las difíciles condiciones macroeconómicas que marcaron el año 2023, la inversión en tecnologías avanzadas sigue mostrando un camino prometedor hacia el crecimiento. Entre estas tecnologías, la inteligencia artificial generativa (IA generativa) ha emergido como una de las principales tendencias desde 2022. Esta tecnología ha captado un notable aumento de interés e inversión, particularmente en aplicaciones innovadoras como la robótica y la realidad inmersiva.
La IA generativa ha experimentado un impresionante aumento del 700% en las búsquedas en Google entre 2022 y 2023, según el informe “Tendencias tecnológicas en 2024″ de McKinsey & Company. Este salto en interés se ha traducido en una expansión significativa en la capacidad de procesamiento de mensajes de los grandes modelos de lenguaje (LLM), cuyo tamaño de ventana de contexto ha crecido de 100,000 a dos millones de tokens. Estos avances están transformando a los LLM en herramientas integrales para tareas empresariales diversas, desde la generación de campañas publicitarias hasta el impulso de chatbots y el descubrimiento de fármacos. La integración de la IA generativa en la robótica está marcando el inicio de una nueva era de robots más capaces y sofisticados.
Simultáneamente, la electrificación y las energías renovables han sido protagonistas en 2023, destacándose por sus altos niveles de inversión e interés, incluso en un entorno económico adverso. Es un sector que ha mostrado un crecimiento constante en las ofertas de empleo, reflejando un compromiso continuo con el desarrollo sostenible y la seguridad energética.
A pesar de una caída general en la inversión de capital privado en tecnología, que disminuyó entre un 30% y un 40% en 2023, el futuro parece alentador. Las empresas están reorientando sus inversiones hacia tecnologías con alto potencial de ingresos y márgenes, como la IA generativa, que ha visto un aumento de siete veces en su inversión. La innovación en IA sigue acelerándose, con un notable incremento en publicaciones y patentes en áreas como la IA genérica, aplicada e industrialización del aprendizaje automático.
El ritmo de la innovación en tecnologías de electrificación y energías renovables sigue siendo robusto, impulsado por su papel crucial en la descarbonización global y las crecientes necesidades de seguridad energética. A pesar de los despidos en el sector tecnológico, las áreas relacionadas con la IA y las energías renovables han visto un aumento en la oferta de empleo, reflejando una demanda sostenida de habilidades avanzadas y el apoyo en infraestructura pública.
A nivel de talento, el análisis de 4,3 millones de ofertas de empleo revela una brecha significativa en habilidades. Menos de la mitad de los candidatos potenciales poseen las habilidades específicas requeridas, aunque el número total de ofertas de empleo tecnológicas en 2023 ha aumentado un 8% respecto a 2021. Este incremento sugiere un potencial de crecimiento a largo plazo a pesar de las dificultades económicas actuales.
La adopción de tecnología empresarial sigue una curva en forma de S, que abarca desde la innovación y experimentación hasta la adopción a gran escala. Las tecnologías en las primeras etapas, como las tecnologías cuánticas y la robótica, muestran avances significativos, aunque enfrentan limitaciones debido a altos costos y aplicaciones especializadas. En contraste, tecnologías como el desarrollo de software de próxima generación y la electrificación están avanzando más rápidamente hacia una adopción generalizada.
La adopción exitosa de tecnologías también depende de factores externos como la confianza de los usuarios, la economía del modelo de negocio, los entornos regulatorios y la disponibilidad de talento. Estos factores varían según la región y la industria, creando escenarios de adopción distintos. Por ejemplo, mientras que los bancos en América Latina implementan IA generativa al nivel de sus contrapartes en América del Norte, la adopción de robótica en manufactura varía significativamente debido a diferentes costos laborales.
Para los ejecutivos, será crucial alinear las estrategias de adopción tecnológica con las capacidades internas y las condiciones del ecosistema externo. Monitorear las condiciones que afectan los casos de uso prioritarios ayudará a tomar decisiones informadas sobre los niveles de inversión, especialmente frente a incertidumbres y limitaciones presupuestarias. Los líderes que desarrollen talento, experimenten con nuevas tecnologías y reimaginen sus modelos de negocio tienen más posibilidades de sobresalir en el futuro.
A pesar de los desafíos macroeconómicos, la inversión en tecnologías avanzadas, especialmente la IA generativa y las energías renovables, sigue y seguirá siendo un motor clave para el crecimiento y la innovación empresarial. Las empresas que apuesten por estas tecnologías y adapten sus estrategias a las condiciones del ecosistema tienen un camino prometedor hacia el éxito futuro.
El autor es socio de McKinsey & Company Panamá.