Para solucionar el problema de las pensiones se requiere de un liderazgo político sin precedentes. Aunque sabemos que lo que prometen los candidatos no es igual a lo que hacen como gobernantes, nunca perdemos la fe y terminamos votando por el candidato que convence con su propuesta de solución al problema de mayor interés para la población.
¿Cuál es el problema de mayor interés para las próximas elecciones? ¿A cuántos electores les interesa ese problema? ¿Cuál es mi propuesta? ¿Cuáles son las propuestas de los otros candidatos? Son algunas preguntas de quienes aspiran a ser elegidos en las próximas elecciones.
Para algunos, el tema de las pensiones en la Caja del Seguro Social (CSS) será el más importante para el país. Dado su impacto social y económico, todos esperamos una solución, los afiliados, no afiliados, pensionados y sus beneficiarios. Si en el pasado no se ha tenido la voluntad política de afrontar este tema, ahora será obligatorio que los candidatos presenten propuestas de reformas al sistema de pensiones.
Entre posibles electores están 700 mil personas en la informalidad, que no aportan a la CSS, entre otras cosas, porque no confían ni confiarán en el sistema actual, sistema que les ofrece quitarle parte de sus ingresos, pero que al final no les pagará una pensión. ¿Por quién votarían ellos? ¿Votarían por alguien que los obligue a financiar a otros o por alguien que les diga que lo aportado les pertenece y es para su propia pensión?
El informe de la OIT devela el esquema piramidal. El Subsistema Exclusivamente de Beneficio Definido (SEBD), con 1,064,195 de afiliados en 2020 (activos e inactivos), tendrá un máximo de 495,780 pensionados por vejez en 2045, que, desde ya quedan notificados que para ellos dinero no hay.
Los otros 568,415 (53%) afiliados en el SEBD nunca lograrán una pensión, según la OIT, es decir, su pensión es cero. Esto, por supuesto, no lo mencionan los ilustres defensores del viejo sistema de beneficio definido y menos lo tienen en cuenta para calcular el promedio de sus presumidas tasas de remplazo. ¿Por quién votarían ellos? ¿Votarían por alguien que los obligue a estar en un esquema piramidal o por el que les garantice el financiamiento de su propia pensión?
En el mismo informe, el Subsistema Mixto presenta 731,600 afiliados en 2020 (activos e inactivos), propietarios de una cuenta de ahorro individual. Estos afiliados, jóvenes en su mayoría, defenderán sus ahorros frente a cualquier persona que amenace expropiarles su patrimonio sin respeto a su derecho constitucional a la propiedad privada. ¿Por quién votarían ellos? ¿Por alquien les expropie sus ahorros o por el que se los incremente para mejorar sus pensiones?
Más de 125 mil pensionados del programa 120 a los 65, y más de 300 mil pensionados actuales en la CSS, votarán por el candidato que les mejore sus pensiones y los libere de la incertidumbre actual, garantizándoles el pago de sus pensiones. Pero para esto, el candidato deberá demostrarles cómo obtendrá los recursos para pagarle estas pensiones.
Se busca un candidato, que guiado por las tendencias mundiales y que, sin necesidad de inventar nada, reforme el sistema de pensiones con una visión de largo plazo. Con los ahorros fiscales de su reforma, garantizará el pago a los pensionados actuales y mejorará la de los menos favorecidos.
Se busca un candidato que proponga un sistema de pensiones sostenible, equitativo y verdaderamente solidario. Un candidato que termine con la incertidumbre y desconfianza de sus potenciales electores y utilice los recursos del estado en beneficio de los más pobres.
Se busca un candidato que revolucione el sistema educativo, para garantizar a todos igualdad de oportunidades a aspirar a trabajos dignos, bien remunerados, con capacidad de aportar a sus propias pensiones para que en la vejez no dependan de los subsidios estatales o peor aún, se conviertan en una carga para las futuras generaciones.