La recién promulgada Ley 352 el 19 de enero de 2023, sobre Políticas Agroalimentarias de Estado (PADE), es la gran esperanza que tienen los actores del agro nacional para poder ser eficientes y, por tanto, competitivos para suplir el gran mercado nacional con agroalimentos de calidad y precios justos y también poder exportar los excedentes.
Nuestra economía “transitista” basada en la estrechez geográfica se dio en los años 1544 a 1739, con el transporte del oro y la plata de Perú y resto de Suramérica, a través del istmo, hasta Nombre de Dios y Portobelo, por el camino real y de cruces hasta España, a “lomo de mulas”. Después, el ferrocarril transístmico en 1850 y posteriormente el Canal Francés en 1878 y en 1904, la firma del Tratado del Canal Interoceánico Hay -Bunau-Varilla. En todas esas épocas y hasta el presente, la economía " transitista” ha relegado las actividades agropecuarias a un segundo plano.
Con nuestra adhesión a la Organización Mundial del Comercio (OMC) en 1997, entramos en la globalización mundial. Posteriormente, el Gobierno del 2004-2009 negoció los tratados de libre comercio (TLC), los más importantes con Estados Unidos, La Unión Europea y Centroamérica. El siguiente gobierno (2009-2014) no implementó las acciones que le correspondían para adecuar a los productores nacionales para competir en eso mercados exigentes; al desconocer la Resolución de Gabinete 17 del 8 de marzo de 2008, que creaba la agenda complementaria y el programa de competividad agropecuaria y de apertura comercial y los fondos por la suma de $ 150 millones del financiamiento del BID, fueron reprogramados para inversión en infraestructura pública. Los productores quedaron sin haber sido capacitados en tecnologías modernas de producción agropecuaria y amigables con la conservación del medio ambiente; los laboratorios y demás instalaciones tampoco se adecuaron.
Las exportaciones agropecuarias de los años siguientes decrecieron 50% en relación al 2008, cuando se exportaron 4,750 contenedores de mélón, sandía y zapallo a Europa y Estados Unidos. Nuestro mercado en dólares ha sido invadido por productos de países vecinos utilizando los TLC con ellos y sin nosotros poder hacer lo mismo, por no tener la eficiencia para competir, desencadenando la nefasta política de subsidios sin condicionarlos a lograr eficiencia y ponerles “fecha de cumpleaños”.
Luego de un análisis profundo a los 86 artículos de la Ley 352 de 2023, consideramos que contempla los cambios y acciones para brindarle al productor nacional todos los métodos y tecnologías modernas de producción amigables con la conservación del medio ambiente y eficiencia y competividad, que aumenten las inversiones en el Panamá rural y comarcal donde existe, según el MEF, los bolsones de pobreza extrema. Se establecerían así cultivos de frutas tropicales en las tierras comarcales que representan el 22% del país, de acuerdo a sus respectivas leyes para exportar aprovechando nuestro hub, sustentado por el canal interoceánico.
El autor es veterinario y exministro del Mida

