Los funcionarios de los consulados marítimos y sedes regionales de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP) no recibieron una circular en la que se les advirtiera a tiempo rechazar el endoso de licencias de marinos de la empresa Samoa International Maritime Authority (SIMA).
El escándalo surgió a raíz de la denuncia hecha por el Gobierno de Samoa a Panamá el 17 de abril de 2015, por una operación ilícita y fraudulenta detectada en la expedición de certificaciones de títulos a marinos por parte de SIMA.
Pero no fue hasta el pasado lunes 7 de septiembre que la Dirección de Gente de Mar de la AMP emitió una circular a los consulados y oficinas regionales en la que señala que la “administración no reconocerá para endosos (o refrendos) los títulos de competencia (CoC) emitidos a no nacionales de dicho país”.
El documento, firmado por la directora de Gente de Mar de la AMP, Magdalena Carrera, fue remitido a los consulados de marina mercante y a las oficinas regionales de la AMP en Londres, Nueva York, Filipinas y Dubai, este último creado por la administración actual.
Carrera era la subdirectora de Gente de Mar y pasó a ocupar la Dirección desde el 31 de agosto, tras la renuncia de José Luis Aizpurúa.
Fuentes gubernamentales dijeron que Aizpurúa abandonó el cargo por solicitud de sus superiores, aunque este aseguró que lo hizo por motivos personales y negó que haya sido por el escándalo de Samoa.
La AMP reconoció que firmó el acuerdo con un representante de SIMA en febrero pasado, pero nunca se implementó.
Aizpurúa dijo ayer a este diario que no tenía sentido advertir sobre un acuerdo que no se ejecutó.
“¿Por qué se iba a enviar una advertencia si no existió ni entró en vigor dicho acuerdo?”, añadió. Sin embargo, según fuentes consulares, desde la firma del pacto se comenzaron a emitir licencias a marinos, cuyo número se desconoce.